Dicen que a la tercera va la vencida, pero esta vez ha sido a la cuarta. Pasados cuatro minutos de las 6 de la tarde del día de hoy, la chimenea de la Capilla Sixtina ha desprendido el característico humo conocido como fumata blanca que anunciaba la elección de un nuevo pontífice, tras la muerte del Papa Francisco. En el segundo día del cónclave y a la cuarta votación hemos podido conocer que el cardenal Robert Francis Prevost, quien ha adoptado el nombre de León XIV, será durante los próximos años el máximo representan de la Iglesia.

A sus 69 años, Robert Francis Prevost se ha convertido en el papa 267 de la historia. Robert es de origen estadounidense, pero con un pasado muy ligado a Latinoamérica. El nuevo pontífice nació el 14 de septiembre de 1955 en Chicago, ingresó al noviciado de la Orden de San Agustín (OSA) en 1977 y es de ascendencia española. Su padre, Louis Marius Prevost, es de ascendencia francesa e italiana, pero su madre, llamada Mildred Martínez, lo es de nuestro país. Robert Prevost Martínez – así es su verdadero nombre – habla cuatro idiomas: inglés, español, italiano y portugués, y haciendo un pequeño homenaje a sus raíces españolas, ha pronunciado parte de su discurso desde el balcón de San Pedro en español.

Tras ingresar al noviciado, profesar sus votos solemnes y ser ordenado sacerdote en Roma, León XIV fue enviado como misionero a Perú donde desempeñó diferentes funciones sacerdotales y de formación como, por ejemplo, la de ser director de un proyecto de formación conjunta de aspirantes agustinos o, siendo también parte de la directiva de estudios en el Seminario Mayor de Trujillo.

En el mismo país en el que fue enviado como misionero, el Papa Francisco lo nombró, en 2014, obispo de Chiclayo, cuya función desempeñó hasta el 2023, ya que en este año el pontífice que le ha dado el relevo le nombró también prefecto del Dicasterio para los Obispos.

Robert Prevost se ha convertido en el primer papa estadounidense de la historia es licenciado en Ciencias Matemáticas, en Filosofía y en Derecho canónico. Debido a su larga estancia en Perú, posee doble nacionalidad: estadounidense y peruana.

El nuevo pontífice ha elegido llamarse igual que Gioacchino Vincenzo Raffaele Luigi Pecci, que escogió el de León XIII. Dicen que cuando el nuevo papa escoge un nombre, suele ser toda una declaración de intenciones. Si nos remontamos al mencionado sacerdote que tomó el nombre de León, podemos decir que desde que inició su pontificado que duró 25 años se dedicó a mejorar las bases intelectuales del clero y fue pionero en abrir los archivos del Vaticano para los estudiosos tanto católicos como los que no lo eran. Y otro de los elementos que caracterizó su pontificado fue que acercó a la Iglesia a las realidades del mundo moderno, algo que recuerda a los objetivos que se marcó el ya fallecido Papa Francisco.

Suscríbete a la newsletter de Divinity y recibirás toda la información de celebrities y corazón cada semana en tu mail.