Los beneficios de volver a estudiar con casi 50 años como David de Estopa, según una experta: "La autoestima se dispara"

Ana López, pedagoga especializada en neuropsicología educativa nos explica los beneficios de estudiar a partir de los 50 años
David Muñoz, de Estopa, sobre cómo afronta la universidad a los 49 años: "Me tengo que poner las pilas"
Cuando las personas adultas llegan a la edad de la jubilación se abre un gran abismo sobre su futuro: ¿en qué van a emplear su tiempo libre? ¿Tienen algún objetivo y/o motivación? Muchos jubilados optan por hacer deporte, dedicarse a algún hobbie o emplear su tiempo en formarse y realizar algún curso o incluso empezar una carrera universitaria por placer. Este último ejemplo ha sido el caso de David Muñoz, el cantante de Estopa, a sus 49 años, ha empezado a estudiar el Grado de Historia en la Universidad de Barcelona: "Tengo muchos trabajos y me tengo que poner las pilas porque los chavales acaban de hacer el Bachillerato y están muy puestos con el tema apuntes. Yo estoy peor”, explicó el propio vocalista a los micrófonos de Europa Press.
Desde Divinity, nos hemos querido poner en contacto con un experto para conocer los beneficios de estudiar y cultivar la mente a partir de los 50 años.
Ana López, pedagoga especializada en neuropsicología educativa nos habla de todas las ventajas
Ana López López es pedagoga especializada en neuropsicología educativa con experiencia en la evaluación e intervención de dificultades y trastornos del aprendizaje, así como en funciones ejecutivas. Además, Ana también es directora de Keili Koulu junto a un equipo de profesionales del mismo ámbito y en una charla en exclusiva para Divinity nos ha hablado del beneficio que puede aportar el estudio en la adultez. Antes de hablarnos de ello, Ana ha querido hacer un matiz entre las personas que han leído durante toda su vida y aquellas que no lo han hecho: “Si yo nunca he leído, voy a llegar a la adultez o a la tercera edad unas dificultades de lectura, seguramente, ya bastante arraigadas. No pasa nada porque te puedes poner a leer a cualquier edad, que te va a venir bien, pero el que es lector de toda la vida, va a tener ya ventaja sobre los demás en el sentido de más vocabulario” y esto va a tener mucha importancia en la agilidad mental que entendemos que es “la velocidad de procesamiento o la rapidez de razonamiento a cualquier edad”. Por lo tanto, entre las ventajas cognitivas que tiene estudiar a partir de los 50 están “estas capacidades cognitivas que se van a ver cultivadas y, por lo tanto, van a ayudar, luego, en tu día a día, a comunicarte mejor, a acordarte mejor de las cosas, te van a ayudar a hacer todo más rápido, a obtener un mejor vocabulario, a expresarte mejor y luego, ya, todo lo que te pueda aportar a nivel de conocimiento y de cultura general”.

¿Influye esto de alguna manera en la autoestima y el bienestar emocional de las personas mayores de 50 años? Por supuesto que sí y de una manera muy satisfactoria: “Se entiende que una persona de más de 50 años elige, en la mayoría de los casos, meterse a algo de estudio porque le gusta” y esto hace que las personas que aprenden por placer sientan “una satisfacción personal muy grande”. “Porque te sientes más competente, te sientes que sabes más de ese tema y, por lo tanto, vas a poder compartirlo con lo demás y, además, se entra en un bucle en el que, cuanto más se, más quiero saber”, nos explica Ana.
Una parte importante de estudiar de nuevo y de hacerlo con gente más joven y en otra generación completamente distinta a la edad adolescente o primeros cursos de educación es la adaptación a los cambios tecnológicos porque, la mayoría de los estudios y centros a los que accedemos actualmente están actualizados: “No solamente están actualizados a nivel de conocimiento sino a nivel de herramientas que hay que emplear para llegar a ese conocimiento”, por lo tanto, si antes había que estudiar a través de los apuntes o tenías que imprimirte las presentaciones y encuadernártelas, ahora puedes hacerlo a través de la Tablet u ordenador “y eso al final, te va a impulsar a que lo tengas que utilizar y aprender y a que tú seas más capaz”. Por lo tanto, “aquella persona que no ha estado familiarizada con este sistema se obliga a ponerse al día y, por lo tanto - si termina aprendiendo en buenas condiciones y con un buen aprendizaje - la autoestima se dispara”.

Por último, en cuanto los beneficios sobre la salud que tiene el volver a estudiar, si bien es verdad que el estudio es una actividad sedentaria, sí que hay un beneficio a nivel cognitivo porque las “conexiones cerebrales van a ir más rápido o estarán mejor alimentadas lo que va a favorecer la atención, la memoria o la velocidad de procesamiento”.