DE ANDAR POR CASA. ¿Leggins y camiseta de tirantes para una alfombra roja? A la actriz Ana Arias no parece escandalizarla mucho la idea, y así se presentó a la gala. En los pies, botas negras y rojas con un pelín de tacón. Lo justo para estar cómoda toda la noche.
LENCERA. La pelirroja María Castro se recogió la melena a un lado y estrenó un vestido corto con estampado de flores a modo de puntilla. Los altísimos peep toe en tono nude la alzaban cinco metros sobre el suelo, y ella feliz.
DE NEGRO. Manuela Velasco jugó la carta de lo clásico: falda plisada, camisa y blazer. Todo en negro. Como detalles unos salones dorados con plataforma y un maxi collar que ejercía las veces de único (y poderoso) complemento.
PARTY GIRL. Irene Escolar fue de las pocas que eligió un estilismo pensando en fiesta. Eso sí, bastante sobria: vestidito con vuelo y gasa, fruncido en la cintura (con zig zag de tela negra) y vuelo en la parte inferior. De Dior. Los zapatos negros de corte salón eran sobrios y elegantes. Como único detalle, una pulsera de Zezana, que ésta sí, nos pareció a-lu-ci-nan-te.
GENIO Y FIGURA. Carmen Conesa acertó con un ajustadísimo vestido azul marino con falda tubo que recuerda a los modelitos a los que nos tiene acostumbrados Victoria Beckham. Las asimetrías del escote (cerrado con dos cremalleras) hicieron las veces de complemento ideal.
DOS ESTILOS. Emma Suárez lleva vestido largo con destellos plateados y nudo a la cintura. Encima, con su particular punto de vista, ha considerado oportuno añadir una blazer de terciopelo rojo. A su lado Blanca Portillo ha ido por la vía segura del little black dress, zapatos dorados y un ínfimo detalle en colgante y pulsera (a juego).
