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No está siendo el mejor momento para Alice Campello. A pesar de que profesionalmente está feliz porque pronto saldrá a la luz su nueva firma de ropa, la modelo se encuentra “muy débil” por culpa de la enfermedad que sufre. Aunque ha querido evitar la preocupación de sus seguidores, la mujer de Álvaro Morata ha hablado sin filtro ante la cámara y ha explicado a través de las redes sociales que se siente “destruida” y que están realizándole muchas analíticas y exámenes para ver cómo se encuentra.
La empresaria, que nunca utiliza los filtros en su cuenta de Instagram, recurría a ellos porque “verdaderamente” los necesitaba. “Estoy destruida, muy débil porque estoy muy, muy anémica”, explicaba Alice, que se sinceraba con sus fans para agradecerles el cariño que le muestran cada vez que se encuentra con ellos. “Desde que dije lo que me pasaba, cuando me paráis por la calle siempre me preguntáis si me encuentro mejor y me encanta”, les decía.
El motivo que la lleva a sentirse así es la fuerte anemia que padece. Se trata de disminución del número de glóbulos rojos en la sangre, que son los encargados de trasportar el oxígeno a los tejidos del cuerpo. Es muy común sentirse cansado y débil, que son algunas de las consecuencias más notables de esta afección. Aún así, existen diversas formas de anemia y cada una de ellas tiene sus propias causas.
Eso es lo que ahora está tratando de averiguar Alice Campello, los motivos que la llevan a padecer esta fuerte anemia que la deja tan “débil”. “La verdad es que la anemia que tengo es muy fuerte. Me desmayé por primera vez el otro día. Ahora estoy haciendo muchas analíticas y exámenes para ver qué pasa y cómo estoy en general”, ha explicado la empresaria.
A pesar de todo esto, la modelo siempre saca fuerzas para sus compromisos laborales y también para atender a sus tres hijos. Junto a Álvaro Morata han formado una familia numerosa que arrasa en las redes sociales. Los dos hijos mayores, Leo y Ale, que son gemelos y tienen tres años, protagonizan a diario divertidos vídeos de sus ocurrencias. El pequeño, Eduardo, tiene tan solo once meses y ya empieza a seguir el paso de sus hermanos.