Miss World News New Zealand ha sido el encargado de confirmar la noticia. "Nuestro más sincero pésame para los amigos y familia de Amber-Lee Friis, que acaba de fallecer. Sigue brillando con fuerza, así es como te recordaremos", escribía el certamen desde su perfil, donde se despedían de una de las finalistas más recordadas en sus 46 años de historia. Repasamos la intensa vida de esta modelo de 23 años cuyo cuerpo fue hallado el pasado lunes en su domicilio.
Aunque aún se desconocen las causas, fuentes del Departamento de Policía de Nueva Zelanda informaron a la revista People de una "muerte súbita" que tuvo lugar el 18 de mayo. Ahora, tras confirmarse esta triste noticia, el entorno de la joven ha querido despedirse de ella, recordándola como una mujer "luchadora, genuína, honestra, con un alma hermosa y una energía inaudita".
Entre los mensajes de condolencias ha destacado el de Nigel Godfrey, CEO del concurso de belleza, que asegura estar totalmente "debastado" por su desaparición. "Es una tragedia terrible que no esté aquí para desarrollar su potencial, que era ilimitado", ha manifestado, asegurando que tras su participación en Miss World New Zealand, donde quedó finalista en la edición de 2018, la modelo ha demostrado ser "leal y solidaria" con el equipo.
Antes de construir una exitosa carrera sobre la pasarela, Amber-Lee Friis tuvo que llevar a cabo un arduo trabajo con su autoestima, que había sido gravemente dañada durante su adolescencia, donde fue víctima de bullying. Tal y como confesó NZ Stuff hace dos años, hubo un día en el que se paró a pensar en lo dura que iba a ser su vida tras experimentar aquello: "Tenía una visión negativa de todo. Me imaginaba a mí misma como una anciana enojada y gorda". Hasta que decidió cambiar su hoja de ruta.
Así, tras una etapa en la que se sintió "atrapada" e "indefensa" en la que trabajó como pizzera y se dedicó a la mecánica, cuando cumplió la mayoría de edad decidió independizarse, cuidar su salud y comenzar a dedicarse a la moda. "Era como una oveja perdida antes de que empezara a escribir las metas de mi vida y descubriese lo que realmente quería hacer quería hacer", narró en 2018 a la agencia antes mencionada, convertiéndose en un ejemplo de superación en Nueva Zelanda tras su exitoso paso por Miss World. Descanse en paz.