La ex mujer de Fernando Alonso desafió los criterios supersticiosos apareciendo sobre el escenario de Malmo Arena con un vestido amarillo de la marca ‘YolanCris. De capas asimétricas de gasa y corte vaporoso, el acertado modelo de la canaria consiguió que en las redes sociales no solo se hablase de su desafinada actuación o de la olvidadiza canción que defendía.
"Llegué con una idea muy clara, y ellos me ayudaron a desarrollarla: quería algo sencillo pero bonito, y tiene ese aire bohemio y también roquero", declaraba la vocalista de El Sueño de Morfeo antes de partir hacia su desastroso viaje hacia Malmö.
Descalza, como la ganadora
La líder de la representación española en Eurovisión apareció, además, descalza sobre el escenario y con joyas de inspiración helénica y una tobillera diseñadas en exclusiva por la marca ‘Aristocrazy’.
La ausencia de calzado le valió a Raquel algunas comparación con Remedios Amaya (otro de los grandes fiascos de España en el Eurofestival, que también salió descalza a cantar). Sin embargo, la desnudez podal no es sinónimo de fracaso eurovisivo: la ganadora de este año, Emmelie de Forest, representante de Dinamarca, también llevó los pies descalzos sobre el escenario.
Maquillaje luminoso y semirecogido 'años 70'
El maquillador de Raquel del Rosario, Miguel Álvarez, explica que ha elegido "un maquillaje muy gráfico, con eyeliner muy grandes y cristales de strass para darle un toque de luz, refleja mucho la luz y es un guiño a los adornos del vestido".
"Lo más importante era que su piel se viera perfecta pero natural y luminosa, un efecto más moderno que llevar la piel empolvada. En Eurovisión a veces los looks son algo exagerados, nosotros hemos apostado por conseguir un punto chic, con labios en color colar, que favorece muchísimo a Raquel. Por último, el pelo con un semirrecogido en la coronilla y flequillo un poco abierto, un poco al estilo de los años 70" explica Miguel en la web de TVE.