Fue de las primeras polémicas de la era post #MeToo. Kevin Spacey era acusado de una supuesta agresión sexual que habría cometido contra un joven de 18 años en 2016. Se trataba del hijo de la presentadora de televisión Heather Unruh. Y ahora, dos años después del escándalo, la Fiscalía de Nantucket (Massachusetts) ha desestimado los cargos.
Los fiscales abandonaron la investigación cuando el denunciante se negó a declarar acerca del móvil que usó aquella noche. Según él, lo perdió durante las audiencias del juicio. En junio de este año, Kevin Spacey reapareció públicamente tras meses fuera de los medios para declarar. Ante el juez, el actor alegó su inocencia y solicitó una copia forense "completa e inalterada" de los datos del teléfono.
Según el abogado del denunciado, solo fue un "coqueteo consensual" del que habría pruebas en el móvil que el denunciante habría borrado. Sin teléfono, el fiscal del distrito de Cape and Island, Michael O’Keefe, consideró que ya había motivos suficientes para desestimar la causa.
Tras esta resolución, a Kevin Spacey aún le queda afrontar más de 30 denuncias por supuesta agresión sexual. Entre ellas, la del también actor Anthony Rapp, que aseguró que el ganador del Oscar por 'Sospechosos habituales" había abusado sexualmente de él cuando tenía 14 años en 1986. Una acusación que provocó que Spacey emitiese un comunicado que dio mucho que hablar.
"Honestamente, no recuerdo el encuentro, sería hace más de 30 años. Si me comporté como él describe le debo la más sincera disculpa por lo que habría sido un comportamiento ebrio profundamente inapropiado", dijo en un comunicado horas después de que Anthony Rapp diese su versión. En este texto, que compartió en sus redes sociales, Kevin Spacey también habló abiertamente de su orientación sexual.
"A lo largo de mi vida he mantenido relaciones con hombres y mujeres. He amado y he tenido encuentros románticos con hombres, y en estos momentos he escogido vivir como un hombre gay. He decidido enfrentarme a esto abiertamente y con honestidad. Y esto empieza con examinar mi propio comportamiento", argumentó.