El ‘tema ex’ siempre es complejo. Sobre todo si el sujeto compartido en diferente espacio temporal, en este caso Guti, zanja y comienza tan gráficamente como hizo: tatuándose las iniciales de Romina Belluscio (RB) y tapando con tinta en el mismo simbólico acto el nombre de Noe(lia López), dibujado pocos meses antes en un subidón de amor. Ambas han coincidido en la entrega de premios Telva, a pesar de que intentaron hacer como que la otra no existía. Romina acudía además recién prometida y como presentadora del evento. Resumimos el tenso encuentro en tres imágenes.
Mientras una Noelia López extra sonriente acababa de atender a los fotógrafos, Romina hablaba a escasos metros con periodistas sobre su futura boda. Explicó para quien quisiese saber que será en Ibiza, pero que no dirán la fecha. También adelantó que ya sabe qué vestido llevará para entregarse a su nueva pasión. Ninguna hizo el menor ademán de admitir la presencia de la otra. Apenas guiadas por el rabillo del ojo, maniobraron astutamente para salir airosas de la encrucijada. La prensa se frotaba las manos ante las chispas del encuentro. Ha trascendido que dentro, en la fiesta, estuvieron a punto de chocar literalmente en varias ocasiones.
El ‘zoom’ de una cámara congeló en esta instantánea toda una declaración de intenciones. Romina, presentadora de la gala de Telva y presumiblemente conocedora de que Noelia sería una de las invitadas, llevó al evento el último anillo (por ahora) que Guti le ha regalado: un solitario con pedrusco.
Menos es más. Ahí lo dejamos. La reportera de Espejo Público lució silueta nueva en las fotos del evento. Un mes antes pasó dos días en el exclusivo hospital Nisa Pardo para someterse a un aumento de pecho. Según la revista ‘In Touch’, Guti se preocupó por ella en todo momento y le hizo un regalo de Dolce & Gabbana para reponer ánimos.