Marta Ortega, hasta llegar a ser presidenta: sus estudios y su trayectoria en Inditex antes de ponerse al frente

  • Marta Ortega será la nueva presidenta de Inditex

  • ¿Qué estudió la hija de Amancio Ortega? ¿Cuál es su trayectoria dentro de la compañía que le ha hecho llegar hasta aquí?

  • De dependienta en un Zara de Chelsea a ponerse al frente de uno de los grandes emporios textiles del mundo

La suya es la historia de un nombramiento anunciado. Basta con echarle un ojo a su trayectoria para ir uniendo las pistas que nos avisaron de que Marta Ortega terminaría siendo la presidenta de Inditex. Una 'creación' de la heredera del emporio fundado por su padre que empezó en la infancia, hace 37 años, cuando Amancio Ortega y Flora Pérez vieron en esa niña a la mujer que tomaría el testigo de la compañía.

El primer paso fue fichar a Brigitte, la au pair británica con la que creció mientras estudiaba en el colegio Santa María del Mar, en A Coruña, para diferenciarla del resto de los mortales en un momento en el que ser bilingüe era lo anormal. Con el inglés ya manejado, sus padres decidieron mandarla a Suiza, una nueva apuesta formativa que le aportaría un nuevo punto de vista en plena adolescencia. Y después llegó su etapa universitaria, donde volvió a cumplir las expectativas de sus apellidos.

Estudió Empresariales en Londres y trabajó de dependienta

Su primera decisión como adulta fue estudiar Empresariales en la European Business School de Londres, el que es considerado uno de los mejores centros del mundo por empleabilidad. En 2007, con su licenciatura terminada, Marta parecía tener la preparación necesaria para adentrarse en el universo Inditex.

Tenía 23 años cuando entró en la línea formativa de Fast Track Rail, la forma perfecta de saber de qué va la multinacional familiar aprendiendo de cerca, a través de una "carrera rápida", a qué se dedica cada uno de los departamentos que conforman la compañía. Esto le hizo pasar por grandes capitales como París o Shanghái, siempre completando su aprendizaje, hasta que en 2008 hizo una nueva parada en Londres, donde cualquiera podía encontrársela como asociada de ventas en una tienda de King's Road o doblando camisetas en un Zara de Chelsea. Sí, como dependienta.

Así fue su entrada en Inditex

Sin embargo, esto de empezar desde abajo no quitaba que siguiese siendo la 'hija de' Amancio. Antes de sobrepasar la barrera de los 30, aunque no tenía poder ejecutivo, Marta ya era vicepresidenta de dos sociedades de Inditex. Un nuevo escalafón profesional que le obligó a instalarse de nuevo en su tierra, Arteixo, donde su padre instaló la sede matriz de la empresa y donde Ortega Pérez se ha mantenido hasta hoy.

Allí, en ese puntito de la geografía coruñesa, es donde se tomaban y se toman las decisiones importantes. De ahí que fuese ese su lugar a estar. Ya por entonces, mientras crecía en poder, la prensa comenzó a interesarse por esa jovencísima heredera de una de las grandes fortunas del mundo que, además de seguir los pasos de su padre, se había convertido en la prescriptora perfecta de esas firmas con las que democratizaron la moda. Era una celebrity. Pero el silencio siempre la benefició.

Las funciones que ha desempeñado Marta Ortega en la multinacional antes de ser presidenta

Mientras el papel couché recurría a su nombre y rostro para cubrir portadas, ella siempre se mantenía al margen, trabajando en ese Inditex del que ahora es presidenta. Hasta hace unos meses, cuando concedió su primera entrevista a The Wall Street Journal Magazine, Marta Ortega jamás había hablado en público de sus quehaceres en la multinacional. Y fue ahí cuando, a pesar de no tener un papel definido en el grupo, conocimos su día a día laboral.

Supervisar el diseño, el merchandising o la imagen de Zara, Bershka, Oysho, Uterqüe, Lefties, Pull&Bear, Massimo Dutti y Stradivarius era (y sigue siendo hasta que en abril del año que viene ocupe su nuevo rol) su principal función. También reunirse cada mañana con Miguel Díaz, su CFO, y con otros altos cargos para evaluar el estado del gigante gallego, visitar algunas de las más de 10 mil tiendas que tienen repartidas por el mundo y pasearse por los pasillos de la sede de Arteixo para opinar y supervisar lo nuevo.

Una labor editorial, con ella detrás de muchas de las tendencias que ha impuesto Inditex en las últimas décadas, que nada tiene que ver con los datos. "Por supuesto que somos una gran compañía, pero siento que no es tan grande, no sé nada sobre las grandes cifras", expresó en septiembre de este año. Además, junto a su madre Flora Pérez Marcote, José Arnau Sierra, Marta Ortega Pérez, Pablo Isla Álvarez de Tejera, Roberto Cibeira Moreiras y Antonio Abril Abadín, forma parte del patronato de la Fundación Amancio Ortega, que concede 600 becas al año para estudios en Canadá y Estados Unidos.