Una forma de andar que (casi) todo el mundo sabe emular
¿Quién no ha intentado, con más o menos éxito, marcarse un Chiquito? Su forma de andar es un clásico al que muy pocos han podido resistirse (con una copita de más o sin ella). ¡Hasta el mismísimo Leslie Nielsen intentó seguir sus pasos!
Para adelante o para atrás, dando saltitos, haciendo que pisas algo ardiendo... Las tácticas para emular este paso que ya ha superado al robocop son infinitas. ¿Cuál es la tuya?
Sus 1 y mil frases: desde el "pecadorrrr" hasta su "hasta luego Lucassss"
"¡Pecador! ¡No puedor, no puedor! ¡Asexsuarrr! ¿Cómorr? ¡Hasta luego Lucasss!" Muy pocos han conseguido dejar marcado un diccionario en el imaginario colectivo. Pero nuestro Chiquito estaba por encima de todo eso. Su lista de coletillas es interminable. Y seguro que tú las has pronunciado, incluso, sin saber por qué: ¿te da cuen?
Es historia de España (pero de verdad)
Gregorio Esteban Sánchez Fernández, Chiquito para los amigos, nació el 28 de mayo de 1932. ¿Y esto que implica? Que lo vivió todo: la guerra, la posguerra, el franquismo y la democracia. Aunque nosotros le hayamos conocido bajo los focos, durante su infancia se tuvo que enfrentar a la pobreza ("vivo rodeado de rrrratas") y a la pronta muerte de su padre.
Con apenas seis años, Chiquito se vio obligado a arrimar el hombro y ayudar en casa. Y así es como empezó. De venta en venta, ese jovenzuelo de la Calzada iba de venta en venta para cantar flamenco y, ya que pasaba por ahí, rifar una botella de aguardiente. Si es que nuestro Chiquito de 'pecador' tenía poquito.
Nos demostró que encontrar trabajo a los 60 es posible
Ser un triunfador a los 20 está pasado de moda. Y si no, que se lo pregunten a Chiquito. A los 59 años, mientras que los de su quinta soñaban con la jubilación, el cuentachistes se topó con el éxito profesional. ¡Y ni tan mal! Nos lo descubrieron en 'Genio y figura' y, desde su primera vez en pantalla, sus frases se hicieron imborrables en la memoria colectiva. La mañana después de su estreno en televisión, nadie hablaba de otra cosa: "¿Quién es ese señor que tanto nos hizo reír anoche?"
Antes de 'Torrente' ya estaba 'Condemor': odiada por prensa y aclamada por público
La crítica la tildó de "bochornosa", pero los españoles fueron a verla al cine en masa. 'Aquí llega Condemor, el pecador de la pradera' se convirtió en una de las cintas más taquilleras de 1996. Y (como no podía ser de otra forma) hoy podemos afirmar que ya es una película de culto.
Aventuras, acción, amor y humor en la campiña francesa, con Chiquito de pistolero, Bigote de escudero, un villano al que capturar y un lema: "No conocía el miedo... ni la vergüenza". ¿Puede ser más castizo todo?
'El Chiquito Ipsum': le hicieron su propio generador de textos de "relleno"
¿Quién nos iba a decir que podrías llegar a trabajar haciendo un guiño a Chiquito? Pues gracias a unos fans del humorista, tus textos podrán tener aires de 'pecador'. Olvídate del clásico 'Lorem Ipsum' y de sus latinajos. Ahora llegó el turno de echar mano del 'Chiquito Ipsum': "Lorem fistrum benemeritaar te voy a borrar el cerito qué dise usteer diodenoo quietooor. Pupita pecador jarl diodenoo la caidita. Ese hombree tiene musho peligro a peich quietooor sexuarl te va a hasé pupitaa…" Y así, hasta el infinito.
Los 'Fistros' de Matutano
Juntar dos cosas que a todos nos encantan es un clásico de la publicidad. Los Bocabits, que ya eran lo más en los 90, salieron a la venta con la cara de Chiquito en los tazos que venían de regalo. Y... ¡al ataquerrrr! Exitazo de ventas.
Todos los hijos del siglo pasado introdujeron los fistros en sus tardes de juegos. Por el módico precio de 25 pesetas, los Chiqui-tazos (y un delicioso snack) eran tuyos. ¡Incluso las propias bolsas de patatas venían con instrucciones para convertirte en un campeón del tazo! La de horas que habremos perdido dándole a la cara de nuestro Chiquito...