Bescansa entrando con su bebé en el carro hasta su asiento del Parlamento. Pablo Iglesias cogiéndolo en brazos en el escaño de al lado. Bescanza amamantando a su hijo mientras el Parlamento votaba por ella o por Patxi López. Decenas de fotógrafos disparando alrededor. ¿Es o no este gesto toda una declaración de intenciones de esta Doctora en Ciencia Política y Sociología? En la segunda ronda, el bebé ha sacado ¡un voto! No es broma. *Nota: sin meternos en polémicas, hay que subrayar, por si se nos olvida a todos y tal, que la conciliación no es solo un 'asunto femenino'.
No es la primera vez que se piden medidas urgentes mientras se vota. Ya dijo hace seis años la eurodiputada Licia Ronzulli cuando se llevó a su hija Victoria al trabajo a Bruselas que quería ser "un símbolo" y que pensaba "en todas las mujeres que no pueden conciliar su vida profesional con su vida familiar". Un año antes, la danesa Hanne Dahl (qué orgullosa estaría Birgitt Nyborg) ya había hecho lo propio: "no me quedó más remedio, mi marido tenía que acudir a una reunión en Copenhague. Me la llevé porque tenía que votar".
La número 1 de Podemos-Compromís-Es el momento por Alicante nació en Guinea Ecuatorial (antigua colonia española), pero lleva viviendo tres décadas en este país. Bosaho (1965) tiene la nacionalidad española, es conocida en la provincia valenciana por su compromiso social y ha marcado un hito histórico. La multiculturalidad de la calle llega también al hemiciclo.
No debería de ser algo destacable, pero lo es y mucho. En Europa lo estarán flipando con que lo subrayemos, de hecho. Uralde y otros representantes de Equo han llegado sobre dos ruedas. Han pillado por sorpresa a todo el mundo y han tenido problemas con los trabajadores de la seguridad, que no les han dejado acceder al Congreso por la puerta principal. Al final han tenido que acceder por la puerta trasera y dejar las bicis en el párking con los coches de los otros diputados. Llevaban bufandas con el nombre del grupo verde europeo (European Green) y chalecos en los que podía leerse: ‘There is no planet B’. Pues eso: ojalá deje de pillar a nadie por sorpresa dar pedales por la ciudad.
Parece que el rojo y la americana, en sus variantes de tono, (además de Patxi Lopez) ha servido para unir a socialistas y populares. Soraya Sáenz de Santamaría, vicepresidenta en funciones. La ex comandante Zaida Cantera, ahora diputada por el PSOE. Y desde el gallinero y de observadora, Cristina Cifuentes, la presidenta de la Comunidad de Madrid.
Ha sido uno de los momentos más curiosos del día. Tania Sánchez y Pablo Iglesias, exes pero sin embargo amigos, "la persona que más admiran" mutuamente, tal y como dijeron en la nota de prensa en redes en la que anunciaron su separación hace unos meses, se han saludado con un caluroso abrazo. Detrás de Iglesias se ha sentado Irene Montero, de 27 años, cuarto nombre de Podemos y quien suena como su nueva pareja.
Traje, corbata, gafas de pasta… y pulseras. Esta ha sido la pequeña licencia de estilo desenfadado del chico del día, que esta mañana ha ido saludando a sus colegas de los diferentes partidos, a los que a partir de ahora verá de frente y no de lado. Jesús Posada, su antecesor sin pulseras, le quiso dar la enhorabuena (en la foto).
Batet es ctualmente diputada, Secretaria de Estudios y Programas del PSOE y número 2 del partido. A sus 42 años, también se está haciendo con otro cargo: coger el relevo de Trinidad Jiménez en cuanto en pionera de estilo socialista.
No hemos podido confirmarlo (no existen registros históricos al respecto), pero se trata de la primera vez que un diputado luce rastas. Su nombre es Alberto Rodríguez, de Podemos, y es este chico que pasa ante el presidente del Gobierno en funciones antes de votar. ¿Qué estará pasando por la mente de Rajoy en ese momento?