La verdad no le hace daño a ninguna causa justa y el cuerpo de Sofía Vergara sin duda lo es. En febrero protagonizó una polémica cuando posó para un anuncio de Pepsi Light en el que echando mano del Photo Shop, como tantas veces es habitual, le rebajaron las curvas para que luciera más 'dietética'. Ahora ha subido ella misma a Twitter fotos de sus vacaciones en México. Su cuerpo es de 10. Y más perfecto parece cuantos menos filtros, efectos y manipulaciones fotográficas le echan encima.
Los secretos para mantener esa línea no son tan secretos. Ella misma los ha explicado en una entrevista en Terra recientemente: "Ni fumo ni consumo carnes rojas desde hace trece años. Como pollo, pescado, mariscos, pero no carnes rojas". Y también, un consejo psicológico: "ser uno mismo, si estás feliz contigo mismo es imposible que la gente no vea cosas buenas en ti".
Sobre sus prominentes pechos también ha hablado en alguna ocasión, y no precisamente de forma cariñosa, este mismo verano dijo en Redbook después de que los de Pepsi se los rebajaran en el anuncio: "Tengo estas tetas ridículamente grandes desde que era súperjoven, desde que tenía 13 años. Estaba realmente flaca en aquella época de modo que era muy extraño tener esas jodidas tetas y ser flaca a la vez. Era horrible. Luego tuve a mi hijo, eché caderas y todo empezó a juntarse".
Porque lo cierto es que la genética ha ayudado mucho a esta mujer a lucir así con la edad que tiene (39 años), según dijo en la revista Shape en febrero de este año en un posado espectacular: "Era ridículamente flaca, me llamaban 'Palillo', y de repente aparecieron esas enormes tetas ¡fue terrible! Solía decirle a mi madre: me las voy a cortar en cuanto tenga 18 años".
Y en People: "Quería cirugía, quitármelas en cuanto fuese mayor, pero ella me dijo: Sofía, cállate, cuando tengas 18 años lo verás diferente. Yo estaba como ¿Por qué querría esas enormes tetas? Tengo una 90DD, es difícil vestirme, no importa lo que me ponga porque me veo como una stripper".
Todo un complejo de pechuga. En Elle insistió también con su disgusto: "Nunca soñé que pudiera aparecer en Elle Magazine, quiero decir: con estas tetas yo sólo podría haber terminado en un club de strip tease o en algo no muy decente". Aunque al final se ha terminado aceptando a sí misma: "Estoy encantada de tenerlas, me han ayudado mucho en mi carrera y siempre me siento sexy".
Al margen de todo esto, de tener curvas espectaculares y el vientre plano como la palma de la mano, el éxito no le llegó hasta que se tiñó de morena: "Soy rubia natural, yo iba a los castings y no sabían dónde ponerme, rubia y con acento latino; entonces me teñí de morena y fue como "¡¡oh, es un bombón latino!!"