Birce Akalay está centrada en sí misma. La actriz, a la que los espectadores de Divinity recuerdan por su papel de Asli en 'Amor en blanco y negro', la ficción que también nos descubrió a Ibrahim Çelikkol, se ha priorizado. Volcada en su trabajo en la ficción 'Bir Derdim Var', un ambicioso proyecto muy esperado en Turquía, la intérprete ha aprendido con los años que es fundamental estar y sentirse bien con uno mismo para poder alcanzar la felicidad y la plenitud. Sin duda, la actriz ha alcanzado la madurez y se encuentra en un momento de máxima serenidad.
Alejada de todo tipo de polémicas y de la presión mediática a la que se ven sometidos muchos compañeros de profesión, la actriz lleva una vida tranquila en la que lleva su fama con naturalidad. Birce tiene los pies en el suelo y con el paso de los años se ha dado cuenta de que ella es la persona más importante y que debe cuidarse para poder 'sobrevivir' en un mundo cada vez más hostil. "Estoy poniendo mucho esfuerzo como todos nosotros en este momento porque busco el bienestar, o mejor dicho, mantenerme bien", ha dicho la intérprete.
Estas declaraciones sobre el momento vital en el que se encuentra se unen a las que realizó hace unas semanas en una entrevista para la edición turca de la revista 'In Style'. En ese extenso reportaje, en el que además posaba espectacular, la actriz aseguraba que se encuentra en una etapa de clama y tranquilidad en la que valora especialmente tener, estar y sentirse en paz. Y para ello, la actriz ha dejado atrás aquellos años locos en los que vivía alocadamente y de forma apresurada sin disfrutar de los pequeños placeres de la vida. "En el pasado, vivía rápido. Era un poco extravagante e incluso me trataba con rudeza la mayor parte del tiempo y era muy dura. Hoy en día, he encontrado el equilibrio", decía la actriz.
Y para alcanzar ese estado de paz es importante que no haya personas tóxicas en nuestro entorno. Por ese motivo la actriz ha tomado una importante decisión, no tener en su vida a aquellas personas que no le aportan nada bueno y que además la desestabilizan. "En lugar de tratar de comprender, logro mantener con esas personas una distancia notable. Así me canso menos espiritualmente", sentenciaba la protagonista de 'Amor en blanco y negro'