'Amor en blanco y negro' ha llegado a su final. Aún recordamos aquel primer capítulo que nos presentaba una relación casi imposible entre una cirujana y un hombre frío como el hielo. Pero ahora, 64 episodios después, las cosas han cambiado mucho. ¡Alerta, que vienen spoilers!
Ferhat está más enamorado que nunca de Asli después de que ella y su bebé corriesen peligro por culpa de la trampa que les tendió su sobrina. Tanto, que en el último capítulo pudimos ver cómo le pedía matrimonio. ¡Y sí, este final ha tenido bodón! Después de mucho quejarse, Ferhat se ha enfundado un esmoquin para darse el 'sí, quiero' definitivo con su chica, que está embarazada de su primer hijo en común.
En la familia de Ferhat, las cosas son distintas. Tras descubrir que su madre sufre un tumor cerebral, el protagonista de 'Amor en blanco y negro' ha decidido enterrar toda una vida de rencor y perdonarla. Una conversación que Yeter llevaba esperando años. "Se acabó lo de huir, no te lo permitiremos. Es hora de que nos lo compenses. Necesitamos una familia. Ella no tiene madre y necesita una, y esa eres tú", le ha dicho a Yeter, que no ha podido evitar romper a llorar al escuchar "te toca comportarte como una madre".
Antes de esta reconciliación, Yeter estaba convencida de que su futuro estaba ligado a Namik. El enemigo íntimo de Ferhat se las había ingeniado para convencer a su mujer de que lo dejase todo para huir con él. Pero esa reconciliación le ha dado un giro a todo. Después de estar a punto de fugarse, Yeter cambia de opinión y decide tender una trampa a Namik con Ferhat de compinche. Namik confiesa todos sus crímenes y, consciente del futuro negro que le espera, decide arder.