Angelina Jolie ensaña muslamen a sus fans japoneses, Madonna se mete a fotógrafa, Lady Gaga va en abrigo incluso con 40 grados, Victoria Silvstedt enseña las bragas a todo el que se le pone delante y Carla Bruni tiene que bajarle los humos a un Sarkozy que ha ido a recogerla al trabajo. Esas son las fotos que más nos han llamado la atención durante la semana y que compartimos con vosotros.
Quizá Angelina jolie se ha enterado de que la RAE nos permite a los periodistas españoles usar una nueva palabra sin ponerla con cursivas. El caso es que la foto que le han disparado mientras andaba promocionando su última película en Japón nos ha puesto en bandeja que le echemos un piropazo: con ese vestido y ese pedazo de muslamen recuerda a la Victoria de Samotracia.
Madonna además de diseñar junto a su hija Lourdes la colección de su marca de moda Material Girl también hace las fotos para promocionarla. No sabemos que tal andará de talento la diva con la cámara, pero no estaría mal que delegue un poco y no intente hacerlo todo ella sola. Sobre todo porque también está dirigiendo la película W.E. -en la que también ha colaborado en la redacción del guión-. Menuda hiperactividad.
Esa que se aparece con ese pedazo de abrigo en la foto es Lady Gaga. Aunque lo parezca no ha viajado a ningún sitio gélido. La imagen ha sido tomada en el aeropuerto de Houston, un lugar en el que en verano se alcanzan fácilmente los 40 grados. O los del aeropuerto se han pasado con el aire acondicionado o nos tememos que la cantante debajo del abrigo no lleva nada, o casi nada, puesto. Y es que Gaga parece que le chiflan esos estilismos en plan exhibicionista.
Ya sabemos que Victoria Silvstedt es un mito erótico, pero no terminamos de comprender que incluso cuando se monta en un yate en Saint-Tropez siga haciendo el papelito de sueca irresistible. Lo de ir enseñando las bragas a todo el que se le planta delante con tan poco estilo y en vacaciones nos parece demasiado. A ver si desconectas un poco, chica.
La foto que aquí reproducimos ha sido disparada por uno de los paparazzi que persiguen a Carla Bruni mientras rueda en Paris a las órdenes de Woody Allen. Al parecer Sarkoy decidió aparecer por el rodaje para saludar aprovechando que es el presidente de Francia y, sobre todo, el marido de la actriz, cantante, modelo y primera dama. Pero por lo que vemos llegó algo enfadado pues Bruni, cigarro en mano, se tuvo que poner a tranquilizarle. Vamos hombre, por una vez que no cenes caliente tampoco es para ponerse así.