Cuando llega el otoño podemos observar cómo se producen distintos cambios en nuestro cuerpo. Entre ellos, se produce la caída del cabello. Pero, ¿será esto algo normal? ¿Cuándo debemos preocuparnos?
Lo cierto es que la caída del pelo durante la temporada de otoño es una realidad y suele afectar hasta un 30 por ciento de la población. Eso sí, antes de preocuparnos en exceso, debemos tener en cuenta que será normal que el pelo se caiga, ya que tiene su propio ciclo de vida. Aún así, será importante utilizar los productos necesarios para cuidar correctamente el pelo y, sobre todo, huir del calor que producen las planchas o el secador.
Pero, ¿por qué se produce esa caída justo en el otoño? Lo cierto es que no hay ningún estudio que confirme que esto es una realidad. Muchos especialistas apuntan a que la caída estacional puede producirse por los ciclos vitales que pueden que siga el pelo. Aún así, en los meses de otoño sí que nos encontramos con distintos cambios ambientales como el sol, el frío o las pocas horas de luz.
También, el estrés podrá hacer que el pelo vaya desapareciendo. El otoño se da coincidentemente con la vuelta de vacaciones y la incorporación al trabajo, por lo que esta será una situación complicada para muchas personas. Es por eso que esto también afectará a nuestra salud y, por ende, al pelo. También existen circunstancias de otros tipos, ya que este tipo de caída podrá estar provocada por algunas complicaciones como es la alopecia androgenética, que responde a distintos factores genéticos o hereditarios.
La caída del pelo estacional será una alteración del ciclo de crecimiento del cabello que puede desencadenar una caída brusca, aunque reversible. Por tanto, aunque no podamos evitar la caída, sí que podremos frenarla. Para ello, lo más recomendable será llevar una buena alimentación, ya que esto será de vital importancia para fortalecer la fibra capilar. Así, para el buen desarrollo del cabello serán esenciales la vitamina A, la C y la E.