¿A quién no le van a gustar unos labios jugosos y brillantes?, que diría Encarnita, la del Baptisterio. Los labios con efecto glaseado se han convertido en un fenómeno mundial. Desde que Hailey Bieber empezó a lucir ese acabado brillante y jugoso como parte de su sello personal, su Peptide Lip Tint de Rhode no solo es que se haya hecho viral, es que todo el mundo lo quiere tener. Lo han llevado las Kardashian, se ha colado en los bolsos de las influencers más buscadas de Instagram y hasta lanzaron una funda de móvil específica para llevarlo colgado, como si de un accesorio de lujo se tratara. El marketing ha hecho su parte, y muy bien.

Con esa estética tan cuidada y esa mezcla entre cosmético que aporta color y también cuida los labios, el gloss de Rhode es de los más deseados. Y, dado su éxito, no ha tardado en aparecer otros glosses que nos recuerdan a él. Desde propuestas de gama alta como el de Laneige, de media como Glowfilter, Masqmai hasta el clon más comentado: The Super Peptide Lipgloss de essence, que cuesta menos de 4 € frente a los 23 € del original. ¿Realmente pueden competir?

Tanto Rhode como essence tienen una misión común: dejan ese efecto de labio brillante, voluminoso y saludable. Las fórmulas también comparten ingredientes clave como la manteca de karité, el palmitoyl tripeptide-1 (un péptido popular por su efecto suavizante) y la vitamina E. En cuanto a textura, ambos ofrecen un acabado denso pero cómodo, cero pegajoso y un brillo que realza la forma natural del labio.

Sin embargo, Rhode refuerza su apuesta por el tratamiento con activos como la vitamina C estabilizada (tetrahexyldecyl ascorbate), ácido láctico y manteca de cupuaçú, ingredientes difíciles de encontrar en productos de precio más bajo. También destaca su aceite de babasú y su empaque minimalista, muy en la línea de la estética 'clean girl' que la propia Hailey ha popularizado.

Essence, por su parte, juega a lo seguro con una fórmula que cumple lo que promete, que además incluye aceite de girasol, escualeno y bisabolol, con propiedades calmantes. Y sí, también contiene el famoso péptido, lo que refuerza su estatus de “clon”.

Lo que realmente separa a estos dos productos no es tanto el resultado en los labios, que, para muchas, puede ser sorprendentemente similar, sino la experiencia que ofrecen. Rhode construye un relato muy completo: una marca joven pero con laboratorio propio en California, una fundadora mediática y un posicionamiento de lujo silencioso. Como dice la propia Hailey: “Queríamos que nuestros productos encajaran en rutinas reales, con fórmulas de maquillaje que también cuiden”.

Essence, sin embargo, prescinde ese 'storytelling' y se centra en la eficacia y el precio. No hay aspiraciones de lujo ni promesas de transformación, pero sí una opción accesible y pintona para quienes quieren el efecto sin gastar de más.

¿Que yo como periodista de belleza con cuál me quedaría? El gloss de Rhode es imagen, es status y tiene una fórmula muy cuidada. Pero si lo único que buscase fuese ese acabado ‘glaze’ que arrasa en redes, essence es una buena alternativa más que digna por solo 3,79 €, que es lo que cuesta ahora mismo en Primor.

Suscríbete a la newsletter de Divinity y recibirás toda la información de celebrities y corazón cada semana en tu mail.