Limpiar las brochas y ordenar el maquillaje: lo que debes saber para poner tus útiles make up a punto

  • Limpiar y ordenar tus cosméticos puede ser otra buena manera de ocupar tu tiempo

Una correcta rutina de belleza debe incluir la limpieza y orden de todo el material que utilizas, desde la puesta a punto de las brochas con las que te maquillas hasta revisar y ordenar todas tus cremas, sombras, coloretes, máscaras de pestañas y barras de labios.

Da mucha pereza y seguramente no encuentras nunca el mejor momento para hacerlo, pero en estos días que tienes que estar en casa puede ser otra buena manera de ocupar tu tiempo.

Cómo limpiar las brochas y esponjas

Igual que en tu rutina de belleza, el primer paso es limpiar tus esponjas y brochas de maquillaje. La importancia de la limpieza no es una cuestión estética, que también, es una cuestión de salud ya que la acumulación de producto supone también una acumulación de bacterias. En cuanto a la frecuencia de limpieza, depende de la cuántas veces te maquilles a la semana, pero si lo haces de manera habitual lo ideal es que las limpies al menos cada 15 días, aunque las brochas y esponjas que se utilizan para aplicar productos líquidos o en crema se deben limpiar cada semana.

Para limpiar las esponjas de maquillaje puedes usar diferentes métodos:

El primero es el clásico: agua y jabón. En un recipiente hay que poner un poco de jabón de lavavajillas y un poco de agua, se sumerge la esponja y la aprietas entre las manos hasta conseguir que salga todo el producto. Es algo tedioso y no demasiado efectivo.

El segundo es hacer una mezcla con jabón de lavavajillas, aceite de oliva y bicarbonato. Humedeces la esponja con agua, la pasas por esta mezcla y de nuevo vas estrujando la esponja entre la palma de la mano y los dedos hasta que aparezca limpia y sin rastro de maquillaje.

El tercer método es muy similar al anterior, pero necesitas la ayuda de un microondas. En un recipiente apto para microondas pones tres cucharadas de jabón de lavavajillas, un par de cucharadas de aceite de oliva y lo llenas de agua. Introduce la esponja y ayúdate de ella para mezclar todos los ingredientes, de este modo se irá impregnando con la solución preparada. A continuación, mete el recipiente con la esponja en el microondas durante unos 15 segundos, déjalo reposar unos 15 o 20 minutos y al sacar la esponja aclárala con agua tibia.

Esos 20 minutos de espera puedes invertirlos en limpiar tus brochas y pinceles de maquillaje. Para estos sólo necesitas el mismo jabón de lavavajillas que has usado para las esponjitas de maquillaje y la palma de tu mano, aunque hay quien usa una alfombrita especialmente diseñada para esta tarea y un limpiador especial para brochas de maquillaje.

Coloca el jabón en la palma de la mano y con la brocha en perpendicular realiza movimientos circulares sin ejercer presión para no dañar las cerdas. Repite este movimiento las veces que sea necesario hasta que veas que la espuma sale completamente limpia. A continuación, enjuaga bajo el grifo, escurre y trata de quitar el exceso de humedad con una toalla o con papel absorbente. Tanto el enjabonado como el enjuague se deben hacer con las cerdas de la brocha o pincel hacia abajo, para evitar que se humedezca el pegamento que las une a la virola.

Para dejarlas secar lo ideal es colocarlas boca abajo en un soporte, si no dispones de uno puedes ponerlas sobre una rejilla o apoyando el mango en cualquier superficie plana, siempre evitando que las cerdas queden apoyadas en ella.

Cómo ordenar las cremas y el maquillaje

Ahora que te quedas en casa cada día es posible que no le des tanta importancia, pero mantener el orden en tus cosméticos te hará ganar espacio en el tocador y tiempo cada mañana.

Lo primero que hay que hacer es lo más doloroso: regalar o tirar todo aquello que no usas o no te volverías a comprar.

Qué regalar. Si tienes cosméticos que no son adecuados para tu piel es el momento de pensar en una persona a la que le pueden ser de utilidad y reservarlos para cuando podáis volver a veros.

Qué tirar. Debes deshacerte de todas las cremas que no recuerdas cuándo compraste porque una vez abiertas, las cremas caducan generalmente entre los 6 y los 12 meses siguientes. En cuanto al maquillaje, tira todo lo que está seco, roto o en mal estado.

Una vez te has quedado con lo que te gusta, con lo que usas y con que tienes intención de usar en el futuro, llega el momento de ordenar. Lo ideal es dejar el lavabo despejado y tener todos los cosméticos guardados en cajones o colocados en una estantería dentro de cajas de metacrilato o cestas.

Utiliza diferentes cajas o cestas para guardar cosméticos de la misma familia: por un lado, las cremas de tratamiento y por otro, el maquillaje. Las brochas puedes colocarlas en vertical dentro de un vaso o taza, así evitas que tengan contacto con otros productos.