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Cuando hablamos de una dieta rica en nutrientes de todo tipo, por lo general lo hacemos pensando en nuestra salud, y en algunas ocasiones para hablar del aspecto de nuestra piel. Pero hay un gran olvidado que es nuestro pelo. Sí, tu cabello necesita vitaminas para estar fuerte, bonito y saludable, y puedes obtenerlas a través de tu alimentación. En el caso de que hubiera carencias visibles, un especialista podrá recomendarte los suplementos vitamínicos que sean necesarios. Como punto de partida, una dieta variada y saludable debería ser suficiente, además de beber una buena cantidad de agua a diario. Ya sabes: para cuidarse por fuera hay que cuidarse por dentro. Y, por supuesto, te conviene conocer cuáles son esas vitaminas que nos harán tener pelazo, cómo actúan y dónde encontrarlas.
Un cabello que exhibe un brillo natural es un cabello sano. Y ese brillo, resultado de una correcta hidratación, se consigue gracias a la vitamina A. Su acción antioxidante previene el envejecimiento capilar, y la podrás obtenerla en vegetales de hojas verdes, zanahorias, frutas como el mango y pescados como el atún o las sardinas.
Estas vitaminas hacen que tu cabello crezca más rápido ya que ayudan a la regeneración celular. La vitamina B7 o biotina, con la que se enriquecen algunos champús, fortalece el cabello, evitando las roturas y puntas abiertas. La puedes obtener de frutos secos como las almendras e incluyendo el huevo en tu dieta.
La vitamina B9 o ácido fólico frena la temida caída del cabello, así que no te olvides de tomar lentejas, brotes de soja o espinacas. La vitamina B12 también juega un papel fundamental para evitar que se te caiga el pelo más de lo que te gustaría. Puedes obtenerla de alimentos de origen animal, como la carne, el pescado y los huevos.
Hablamos mucho de la vitamina C para darle luminosidad a nuestra piel y cuidar de nuestra salud en general. En lo referente al pelo, consigue fortalecer los capilares y favorece la regeneración celular. Ya sabes que puedes encontrarla en cítricos como las naranjas, los kiwis y las fresas, pero también en las verduras de hoja verde y en el brócoli.
Un gran porcentaje de la población presenta unos niveles bajos de vitamina D. Para que no te encuentres en esa situación, aprovecha los rayos del sol en el rostro y en los brazos unos 10 minutos diarios. Y para comer, no dejes a un lado el huevo, los champiñones o el queso. Te lo agradecerá tu pelo, pero también lo harán tus huesos, ya que la vitamina D es esencial para que tu organismo absorba el calcio.
Para que las vitaminas que hemos mencionado lleguen de manera eficaz a nuestro cabello, la vitamina E es fundamental, ya que b. También influye en la fortaleza del cabello, previene la sequedad y evita su caída. Obtenla de cereales (a ser posible integrales), la zanahoria, la leche o vegetales de hoja verde.