Moda niña buena, la moda angelical que nunca se ha ido pero que ha arrasado en verano

divinity.es 01/09/2019 08:59

Una tendencia que vuelve cada verano, y que este año lo ha hecho con más fuerza que nunca, es la de los vestidos de niña buena. Florecitas, volantes, cuadros de vichy, encajitos, colores pastel, tejido de nido de abeja… el imaginario es tan amplio que existen multitud de opciones para conseguir con una prenda el aspecto aniñado y cándido de los vestidos de la infancia. Te damos algunas claves para que esta tendencia no se te vaya de las manos.

Love Shack Fancy, una de las firmas que apuesta por combinar el romanticismo y los aires aniñados en sus colecciones, y su vestido Hannah, es la elección de Cara Delevingne. La modelo, poco habituada a dar una imagen de niña buena, rebaja tanta candidez con unas zapatillas Converse All Star y un bolso negro de piel de Balmain. Lección número uno: si el vestido es muy cándido y muy corto, llévalo con deportivas.

Cecilie Bahnsen es una de las diseñadoras estrella de la semana de la moda de Copenhague y con su estilo etéreo y lleno de romanticismo ha conseguido conquistar a toda Europa. Entre su corte de seguidoras incluye a caras tan famosas e influyentes como Pernille Teisbaek. Sus señas de identidad son la delicadeza de los detalles y los grandes volúmenes, que la estilista contiene combinándolos con accesorios sobrios y arquitectónicos. Lección numero dos: no te pases de romántica.

Las colecciones de Simone Rocha están invadidas por la nostalgia. Miran no solo a los tejidos y patrones campestres de otras décadas y siglos, también a los de la infancia a base de tejidos brocados, volúmenes, mangas farol, cuellos bobos y volantes. La estilista Kate Foley busca potenciar toda la vertiente romántica e infantil de la firma con una diadema de cristales. Lección tres: pásate de romántica y princesita si sabes hacerlo.

Un vestido de cuadros y unas sencillas sandalias de pala no tienen por qué recordarte a tu más tierna infancia, pero cuando la combinación es la que lleva Laura Escanes la asociación de ideas es inevitable: aquellas sandalias de hebilla con suela de madera no se olvidan fácilmente, aunque estas de Genuins son mucho más ligeras, porque llevan la suela de corcho, y son ergonómicas. Lección número cuatro: permítete un toque nostálgico.

Aunque la firma Maje no es muy dada a la nostalgia, ha introducido elementos como el organdí, las mangas de volante o el estampado de vichy que indudablemente recuerdan a la infancia. El vestido que lleva Nuria Val es un modelo de aire infantil que, según se combine, puede acabar resultando cursi. Para evitar caer en el disfraz no hay que pensar demasiado en los complementos, de hecho, a ella le ha bastado un simple bolso en bandolera para rematar el estilismo. Lección número cinco: no intentes hacerte un look completo.