Aciertos y errores de la inauguración del Festival de Cine de Venecia 2025

De Cate Blanchett a Tilda Swinton, dos de las mujeres más dispares pero igual de espectaculares en la alfombra de anoche, pasando por una Heidi Klum que sigue queriendo gritar al mundo que las normas no son para ella. Ni en el nuevo decoro del exquisito Cannes ni en el perfume chic de esta Venecia de cine e historia.

Dicen que Venecia es una de las alfombras más glamurosas del mundo. Y las estrellas, que bien lo saben, llegan a la ciudad de los canales con sus maletas llenas de sorpresas. No siempre son tan glamurosas como esperan algunos, pero sorpresas siguen siendo y eso también es la magia del festival en este maravilloso rincón del planeta.

Aciertos

1. Tilda Swinton hizo ayer honor a esa eterna tendencia que todo lo puede en una noche de gala, la de llevar una falda importante con una camisa blanca. La suya era abullonada, la falda, de tafetán negro. Su camisa de mangas francesas, en trompeta de volantes. Chapó.

2. Cate Blanchett rescató con éxito este Armani Privé que ya estrenase en los SAG de 2022. Un vestido de poderoso escote en piedras azabache y falda sirena con bolsillos. Volvía a estar espectacular.

3. Fernanda Torres, o cómo explotar toda la sensualidad de una mujer sin mostrar ni un centímetro de piel.

4. Toni Servillo, protagonista de “La Grazia”, y su mujer Manuela Lamanna demostraron cómo estar elegantes a cualquier edad y tan ad hoc a una ceremonia como esta.

5. Heidi Klum hizo resurgir el manido rosa empolvado, que ya casi teníamos archivado, con este lencero de bustier de escote corazón. No era mi favorito, pero ella es un cañón de señora que nunca pasa sin pena, ni gloria. Y eso, también es acierto.

Errores

1. La sorpresa masculina fue Nicolás de Dinamarca. Tuvo su rollo que pusiera el punto royal de esta edición. Pero lo del esmoquin de terciopelo en el agosto veneciano como que me chirriaba.

El terciopelo a mí me encanta pero, se empeñe quien se empeñe, es para el invierno por una pura lógica de temperaturas. En esto no caben modernidades de moda.

2. El Intimissimi de Barbara Palvin se me antojó como eso mismo, algo íntimo y sexy para saltar de la cama con un amante eterno y brindar con champán en una suite bajo las estrellas. Pero fuera de esa soñada suite se me hizo poco glamuroso en la alfombra de Venecia.

3. En el mismo rollo lencero de su madre, pero sin ser Heidi, Leni Klum se fue al negro. Y no, no era tan error pero aún le queda trecho por recorrer para ser un acierto tan rotundo como su madre, hasta cuando a ella se le va la olla.

Bienvenidos seáis todos, tras el verano, a una nueva temporada de aciertos y errores en mil y una alfombras, momentos y eventos.