“Para una cita sexual hay que comer poquito, ligerito y con mucha proteína”
Llegar a la casa de esta mujer a la hora del almuerzo es siempre una alegría. Lo mismo te sorprende con un pica pica de escándalo que con un menú completo como para quedarte a vivir. Pedro, un enano rubio casi escandinavo da patadas a un balón al fondo de la casa. Caritina recibe con sonrisas, todas esas que a veces faltan en el mundo de la High Society…
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Caritina Goyanes quedo contigo a la hora del almuerzo ¿esto es una suerte? Porque vengo con un hambre…
Sí. (Risas). Ahora te daré de comer.
¿Qué me has preparado?
He preparado de primero una sopa de cebolla gratinada, que a mí me encanta y la hago con muy poquita grasa porque la escurro mucho, y de segundo una merluza con almejas y salsa verde.
Muy bien. A mí me gusta todo. Lo único que no me gusta en la cocina es el chocolate
¿De verdad?
Soy poco goloso así que todo lo que ves es de puro “salao”… (Risas)
Yo también soy de salado, pero el chocolate gustarme, me gusta.
Las recetas de Caritina: fáciles, originales y baratas... Todo el mundo sabe que te dedicas a dar de comer a otros con tu empresa de catering y ahora sacas esto…
Cuando me propusieron la idea me gustó mucho y me dio un poco de pereza el típico libro de una receta y otra y otra... entonces decidí darle un toque personal, porque yo el catering lo personalizo muchísimo y quise reflejar lo mismo en el libro. Siento mi pasión por la cocina desde que soy pequeña y cómo me ha llegado esta pasión a través de mi gente, de cómo me han llegado las recetas, de mis restaurantes, de mis viajes…
Pero tú en tu trabajo no cocinas ¿no?
Yo al principio cocinaba, ahora mucho menos. Simplemente coordino y pruebo cosas nuevas.
Sin ninguna maldad, porque mírame a mí, cómo se hace para tener esta empresa y estar a dieta, querida…
La verdad es que es bastante complicado porque estás todo el rato rodeado de comida; aunque cuando llevas mucho tiempo cocinando lo mismo tampoco te apetece mucho. Al principio todo era chiquitito y apetecible y súper bueno. Ahora ya no. Me obligo a desayunar bien, comer y cenar para no picar.
A mí lo que me pasa es que cuando cocino para otros, me gusta, pico y pruebo tanto mientras cocino que luego no tengo ganas de nada. Te voy a echar la bronca… Me han chivado que has hecho la Dukam. Eso es lo peor para adelgazar…
Yo creo que no.
El mejor por rapidez, pero tú que eres una experta en comida, inflarte a proteínas…
Tomas de todo menos pasta, azúcar, fritos… Yo no conozco a nadie que adelgace a base de pastas, legumbres, arroces…
Pero que esto no lo digo yo, que lo dicen los nutricionistas…
Hay mucho detractor de la dieta, pero creo que ha hecho mucho efecto en mucha gente. Es una guerra entre expertos en la que no entro. Me he hecho análisis y estoy perfecta. Estoy bien, y a mí me parece que tomas de todo. Es verdad que en la primera fase no tomas fruta porque tiene mucho azúcar y como a mi la fruta no me va pues no la hecho de menos. El resto creo que está muy compensado.
¿Tú te encuentras bien?
Yo me encuentro fenomenal. No me ves.
Pues no hay más que hablar… (Risa). Tú hoy me has preparado de segundo merluza, pero sé que te gusta algo tan banal como la milanesa. Vamos carne empanada…
Me encanta, me encanta. Ahora no puedo tomarlo pero me encanta en todas su medidas y formas. El escalope de ternera empanado me encanta.
¿A qué empanado de la vida le darías algo de comer para arreglarle el cerebro?
Risas. Quién está empanando en la vida, pues... los hay, muchos, que salen habitualmente en muchos sitios…
¿Ves la tele habitualmente?
Sí, soy muy de televisión. Haga lo que haga la dejo de fondo.
Vamos al Money. ¿Es caro contratarte?
No. Bueno vamos a ver, esto es como todo.
Bueno tú me vas a decir que no porque tienes que venderte y lo entiendo…
No, de verdad. Es como todo. Yo hago catering desde 10 euros por persona hasta lo que quieras. Yo tengo ahora uno en marzo de 800 personas por 10 euros.
¿Qué se come por diez euros en un catering?
Aquí es porque hay mucha gente. Está claro que no vas a dar un solomillo. Es cómo lo das, sobretodo ahora porque hace unos años era: me gasto lo que sea y me va fenomenal, sin mirar el presupuesto, pero ahora que sí lo hacen, reducen de donde pueden y hay que darle mucha marcha al ingenio. Se pueden dar cosas monas y que no sean caras. A mí me encanta que la gente celebre las cosas porque me contratan y porque con el momento que estamos viviendo es bueno consumir lo más que pueda cada uno. Hay que acoplarse a todo y sin mucho dinero se puede hacer desde un buffet de rissotos, no caro y que se va haciendo en el momento, una pizza party…
Muy bueno…
Se puede hacer de todo pero hay que darle una vuelta.
Cambio de tercio. Si comiese hoy con nosotros la Duquesa de Alba ¿qué prepararías para comer?
Eh…
Te lo voy a poner más difícil. No come con nosotros y te encarga su cena porque esta noche tiene una cita sexy… ¿Qué le preparas?
Unas ostras, por ejemplo. Yo siempre recomiendo para una cita sexual comer poquito, ligerito y mucha proteína. Algo de marisco, deseando pescado. Muy ligero para poder luego actuar ella.
Es que si con 85 se infla a cenar se queda frita la mujer. ¿Te gusta la Duquesa?
Sí, me parece un personaje distinto.
¿A qué personaje no te habría gustado dar de comer?
A nadie.
Esto lo dices como empresaria...
No, no de verdad. A nadie. Mira el año pasado tuvimos una gala benéfica de Rafa Nadal y era la pera. Ahí te puede dar miedo escénico porque hay mucha gente muy importante, pero de ahí a no querer hacer algo, no. Yo estoy encantada de dar de comer a todo el mundo.
Pero a veces es porque no te apetece. Si yo tuviera tu empresa y mañana me llamase Paris Hilton seguramente no tendría tiempo… Porque ¿qué le das de comer a alguien que no come?
Te las ingenias.
¿Quién ha comido mejor de tu mano?
Mi marido. Seguro. Ahora ya hago menos cosas con el niño, pero cuando nos casamos estaba todo el día cocinándole.
¿Y Pedro?
Bueno. (Sonríe).
Pedro es eso que si oímos golpes…
…es que se ha puesto las botas de esquí y no hay quien se las quite.
Tiene dos años…
Los cumple ahora en marzo.
Este come bien. Parece germano, rubio y fuerte…
Sí. Este come de todo. Desde muy pequeñito comía de todo. Espárragos verdes, gambas, el tío chupa las cabezas de las gambas… Se lo come todo y nunca me da problema con la comida.
Veo en tu libro que es importantísimo no sólo lo que comemos sino cómo lo comemos…
Para mí es lo más importante.
Te vi en Ana Rosa el otro día preparando un Crunch estupendo…
El tema del Crunch suele ser en fin de semana…
Juntamos desayuno y comida…
Justo. Y suele haber niños, entonces hay siempre tiene que haber algo para los niños. Las chuches gustan a los niños y a los mayores. En bodas y barras libres ponemos las bebidas con chuches y vuelan, y ahí no hay niños. La decoración al final es lo más importante, porque gente que sepa hacer bien la comida hay mucha, así que hay que darle un toque personal. Intento que cada cosa sea distinta., tematizar cada evento…
Tronco de castaña, pularda rellena… (voy Leyendo de su libro). Te voy a proponer una mesa distinta…
A ver.
Imagina que yo soy un cliente histriónico que mañana tengo a comer a Doña Letizia, a París Hilton, que la hemos nombrado antes, a su amiga de delgadez Victoria Beckham, a Sonsoles de Zapatero, a gente muy distinta de muy distintos ámbitos. ¿Qué les damos?
El otro día me contaron que el plato preferido de Doña Letizia era una hamburguesa. Le pondría una que se quedaría encantada.
Dicen que come…
No lo dudo, hará mucho deporte.
La genética, los nervios… Seguimos con la mesa. París Hilton y Victoria Beckham…
Ensaladita con mucho verde y poco más porque estas dos no creo que coman mucho.
En el último embarazo de Beckhan leí con terror que se alimentaba de unos polvos proteínicos de manzana en una solución y Coca Cola Light…
Yo respeto que cada uno haga con su cuerpo lo que le de la gana, cuando estás embarazada es distinto, pero oye es su responsabilidad. Yo no haría eso, me cuidé muchísimo.
Medias noches de tortilla de patata, bocadillos de chorizo mantequilla y con foiegras… (sigo leyendo). Esto es una bomba… (Risas)
Eso son las cestas infantiles. Me encanta hacer fiestas infantiles porque la mesa queda con muchísimo color.
Y puedes hacer una fiesta infantil para adultos…
También.
Crema de tomate con albahaca y bolitas de mozzarella… ¿Este libro lo has escrito tú entero?
Desde la primera hasta la última palabra.
¿Qué no te falta nunca en la cocina?
Aceite de oliva, vinagre de Módena…
Te gusta más el vinagre italiano que el español…
Sí. Es mucho más suave y más dulce y con la dieta me he acostumbrado mucho porque no puedes tomar aceite y te sabe mejor una ensalada con el vinagre de Módena.
Y…
Pescado, a mi marido y a mí nos gusta más que la carne. Y en la cocina tengo de todo porque cuando tienes un niño en casa tienes que tener un poco de todo. Fruta, verdura, legumbres… Y Coca Cola Ligth porque, como la Beckham, soy totalmente adicta.
¿Qué no puede faltar en tu vida?
Mucho amor, mi hijo, mi familia… Movimiento, trabajo, salud, imagino que como a todo el mundo.
Mucho amor. Veo que estás bien a pesar de lo que dicen a veces otros…
Estoy bien, fue un rumor que de repente salió antes de Navidad porque me fui de viaje a Argentina con una amiga a la boda de otra amiga y las cosas no están para irse dos, mi madre además no estaba, el niño estaba aquí… en fin. Fue una decisión que tomamos. De ahí a una crisis… Nosotros somos muy independientes por mi trabajo. Muchas veces me acompaña y otras no. Y somos muy de salir con nuestros amigos.
Hablando de amor (vuelvo al libro), mi ligue pone aquí. Ensalada de cangrejos de río, virutas de foie, merluza en salsa verde… ah, me has tomado como un ligue hoy con el menú… (risas)
Has visto eh. Te he hecho una encerrona. (Más risas).
A mí me dan bien de comer y me quedo a vivir. Habla con tu marido… ¿Hay comida para ligar y para todo en este libro?
Hay comida para todo y sobretodo lo que hay son ideas porque al final es un libro de recetas para situaciones. Tú puedes decir voy a hacer unas albóndigas coges un libro de recetas, que hay miles, y las haces. Pero con este libro puedes resolver el que vengan amigos a cenar, o los suegros, o mis jefes, mi ligue, o vienen amigos a ver el fútbol… Es para ocasiones. Doy ideas prácticas que luego puedes mezclarlas.
Los suegros. Si no vienen a cenar es mejor, pero una vez que vienen…
Yo con los míos me llevo muy bien. A mi suegro le encanta comer muy bien y mi suegra cocina fenomenal de toda la vida, su madre mejor todavía…
¿La gente come bien en la calle?
Yo creo que no.
¿Les observas como yo en estos eventos que compartimos? Mucha gente no come bien gastronómicamente y otra no lo hace bien urbanísticamente hablando. ¿Cómo lo ves?
Hay de todo. Lo de urbanísticamente hablando es que a cada uno nos han enseñado de una forma a comer y…
Eres muy cándida Caritina, hija… Hay gente muy fina en sitios muy finos que comen muy mal y muy poco fino… Voy a hacer una de esas maldades por las que luego no siempre te invitan a los sitios. Yo estuve hace nada en un cóctel de unos Premios de Moda muy importantes donde una señora comía con la mano y con guantes. ¿Eso es que la enseñaron diferente?
No, no. Eso no está bien hecho.
Los guantes irían a la basura después, imagina el raso con las croquetitas…
Desde luego.
¿Qué prepararías a tu churri en una noche de amor sin que él lo supiera?
Sushi, le encanta, además es muy ligero y lo puedes dejar preparado por la mañana y así tener tiempo para embellecer desde el cuarto a tí mismo.
En plan Samanta de Sexo en Nueva York, esperando a su amado desnuda con el sushi sobre el cuerpo… Lo vimos de nuevo en Divinity
Samanta me parece una crack, la mejor de toda la serie pero tanto como eso no sé si me atrevo yo.
¿Quieres más niños?
Sí. Pero ahora se me está haciendo bola el tema porque lo acabo de tener y ahora lo va a tener mi hermana así que me espero.
¿Cómo está tu hermana?
Muy bien, fenomenal.
¿Tu madre?
También. Todos fenomenal.
Pues tendrás que ponerte al lío eh…
Ya, ya.
Hablemos de política a través de la comida. ¿Cómo ves al señor Rajoy?
Creo que se cuida mucho. Le pega mucho el pescado y el marisco.
Como buen gallego. ¿Al señor Zapatero?
No sé. A Rajoy le veo de comida sana y a zapatero no sé…
Vamos que te la bufa…
Sí, me da igual. (Risas).
Es la sensación que me estaba dando. ¿Y el señor Aznar y su tableta?
Se cuida muchísimo. Y es que es desde hace poco, no, porque yo veraneaba al lado de él en Ibiza y es un señor que se levantaba a correr, a nadar y comían sano.
Pues a ella le lucía menos que a él…
Haría menos deporte. Es que el deporte es muy sano.
A mí me han dicho que come poco Aznar así que si le invitaos a comer no se comería…
…ni una almeja.
(Vuelvo al libro). Miniperritos calientes…
Eso es para los días de fútbol. Aquí se ve siempre.
Lo peor de presentar un libro es… que vengamos a darte el tostón…
(Risas). He tenido la gran suerte de estar en la segunda edición enseguida y estoy muy contenta, pero me desespera no controlarlo porque se agotan los libros y tardan en reponerlo. Con es estoy indignada.
Los huevos encapotados de María. ¿Va con doble? ¿Quién es María?
Una cocinera que había en casa de mi abuela. (Risas). Hacía unos huevos fritos envuelto en bechamel y frito de nuevo. No he visto nada más bueno en los días de mi vida, ni más “engordante”.
El cocido de Leonor… A mí nada me gusta más que un buen cocido madrileño
Leonor es india amiga mía y hace un cocido que te mueres pero a mí el cocido no me gusta mucho porque no me van demasiado los garbanzos. De legumbres me gustan más las lentejas.
Y la madre de Leonor hace la paella…
La hace que te mueres.
Yo tengo la teoría que la comida sabe mejor según el sitio en que la tomes. Una paella en chiringuito playero por destartalado que sea…
Sí, la paella no es lo mismo en cualquier sitio que en el chiringuita de la playa. Total.
La solera es la solera. ¿Eres de salir a la calle a comer?
Me gusta mucho sí.
Y una pócima para el desamor…
Un helado dulce.
¿No será la dieta del cucurucho?
No, no. (Risas). El dulce es lo que te quita la tristeza, el ánimo telo da el azúcar. Pero yo soy más de salado.
Espero que te vaya muy bien e libro querida, que como dicen en los pueblos te preñes pronto, para que Pedrito tenga compañía y que siga el éxito. Y pronto comemos. Gracias y un placer.
Claro. Muchas gracias.
Pedrito reclama atención desde algún rincón de la casa. Hemos abierto el apetito y la merluza con almejas en salsa verde espera. Sentarse a la mesa con quien disfruta de la comida es placer doble