Confiesa que le encantaría ser madre pero que no ha llegado el momento
Lo mismo presenta concursos de agilidad mental, que se encierra en el campo con unos díscolos niños de papá o que granjea con fauna y flora en busca de esposa perfecta para tórridos granjeros. Nada se resiste a los encantos de esta rubia de eternas simpatías y abultadas dosis de sentido del humor. Cito a mi amiga en el Torreón. Un hotel de Navacerrada, idílico en las tardes soleadas de otoño. Y allí me esperan dos rubios. Ella y el sol.
[PUEDES VER LO MEJOR DE LA ENTREVISTA AL FINAL DEL TEXTO]
Ay Luján… (Risa ya para empezar)
Ay Nacho. Qué bonito lugar. Bucólico.
¿Por qué me citas aquí?
Porque te venía bien. Cerca de tu casa. Y dije pues bueno. (Risas).
Maravilloso sitio para descubrir. En Navacerrada. El Torreón. Con esta maravillosa atalaya sobre la sierra…
Cierto. Ya sabes que a mí me gusta mucho el lugar en el que vives. Invítame más. Yo pensaba venir con amigos pero a tu casa. (Risas).
Pero si luego nunca puedes, que estás llena de proyectos. Acabas de arrancar de nuevo con los Granjeros… Cómo están este año…
Pues están con más amor que nunca, con más pasión que nunca, con más risas que nunca y muy fogoso ¿no? Una cuarta edición siempre es complicado que a la gente le sorprenda lo que está viendo y la primera sorprendida soy yo. Se presentan más entregados a la causa que nunca.
Lo hacéis en Asturias. Cómo es trabajar en tu tierra años después…
Genial, imagínate. Al ser grabado allí vino toda la familia a ver la grabación. Un despliegue…
Eres de Salas…
Claro.
Y encima con amigos asturianos comunes, como María Lafuente. Por cierto no estuviste este año en su desfile…
Sabes dónde estaba, grabando. Algo de lo que no te puedo hablar. Y me perdí su maravilloso desfile.
Hizo algo maravilloso sobre el mar y la conciencia ecológica. De verdes y marinos a los rosas… ¿Tú qué te has hecho que estás estupenda?
Qué me voy a hacer, nada hijo. Que pasen los años, no adelgazar nunca por mucho que me lo proponga y poco más. Bueno, Carmen Navarro, eso sí.
Bueno guapa, entonces claro…
Mi Carmen Navarro es mi ángel de la guarda.
Yo tendría que ir pero me da tanto miedo… Soy muy miedica yo hasta para los tratamientos de producto
Pero una cosa es cirugía, que comprendo que tengas medo, y otra esto.
Es que de cirugía ni hablamos porque yo veo una aguja y me caigo al suelo…
Yo todavía no lo he hecho. No diré de este agua no beberé pero el tema bisturí y aguja tampoco me va. Pero Carmen es otra cosa.
Luego creen que la gente de la tele se hace de todo. Eso dicen…
Cuando uno te ve se da cuenta de que no te has hecho nada. A mí me da pavor.
A mí a veces me da pavor el resultado. Que luego ves a la gente que parecen peces globo… (Risa)
Pero no sé si es peor eso o gastarnos las arrugas que nos gastamos tú y yo.
A mí me gustan mis arrugas ahora. Pero si yo he tenido siempre mucha arruga de expresión, soy así. No sé dentro de 10 años si me espantarán…
Pues una cirugía bien hecha…
Ah si yo no lo critico, critico los resultados y cuando dicen, “si yo no me he hecho nada”…
Y se quedan con cara de susto. (Risas). Pues no sé, un algo, una lipo.
Mira eso sí, que hace falta. (Risa). Córteme por aquí…
Y por allá.
Bien de proyectos y en la vida, cómo vas…
Pues encantada, con mi marido, con mis amigos entre los que te incluyo, y poco más.
Enamoradísima…
Todavía no tengo maridofobia, si esa es la pregunta (risas). Pero he dicho todavía.
Es que el Benja cunde que no veas… (Más risas). Y con ese tamaño. Armario de cinco puertas…
Es poco manejable la verdad. (Risa). Pero bien. Moderadamente contenta. Ni arriba del todo ni abajo. Arriba implica que estás comportándote como un iluso, porque nada es maravilloso en la vida. Y abajo que estás con una depresión que deberías tratar.
Pero es mejor estar arriba que abajo ¿no?
A mí arriba tampoco me gusta. Considerarte que estás arriba del todo es un poco iluso y engreído.
¿Qué es para ti estar arriba del todo?
Y no sé lo que es estar arriba del todo porque no lo he estado nunca pero la gente que dice que lo está me sigue pareciendo ilusa, porque en esta vida en un segundo todo cambia y de repente estás abajo.
Eso está claro. Y más en nuestro trabajo. Pero yo creo que es parte de la magia de la tele. La sorpresa continúa en todo…
Sin duda. Pero cuando hablas de tu vida no sólo te ciñes a tu trabajo, de allí lo de mi moderadamente contenta. Siempre hay algún problema. Todo el mundo tiene problemas. Y hay que estar moderadamente preocupado también.
¿Qué te preocupa?
Que mis amigos, mi familia y mi pareja estén bien. Que la gente que trabaja contigo esté feliz, que tú estés feliz con lo que haces. Y todo eso es complicado.
Pero somos privilegiados
Sin duda. Tenemos trabajo, estamos enamorados, tú también (Risa)…
Yo siempre estoy enamorado, de la vida… (Risas)
Pero ahora especialmente de un ser humano de la vida. (Sonríe). Tenemos trabajo, las familias están bien, nuestros amigos contentos… Va bien la cosa.
El otro día me decía un amigo que cuando mejor estás en la vida es cuando andas enamorado y en esos momentos no puede estar en el mercado. Caprichos de la vida… Es cuando más éxito se tiene
Yo siempre digo que es maravilloso trabajar con gente, como hago en Granjero, que está buscando enamorarse. Porque están felices, radiantes, el mundo es maravilloso, tiene otro color, sonríen…
¿Se puede buscar el amor en la tele? Buscan de verdad e amor o el amor exitoso
Sí. En el caso concreto de Granjero busca esposa es más que evidente que van buscando el amor, habrá otras personas que busque otras cosa, pero los granjeros eligen y buscan el amor. Lo creo. Buscan un futuro. Hemos casado a una pareja y hemos emparejados a muchas.
¿Qué te apetece hacer ahora?
Pues me apetece seguir estando como estoy, seguir trabajando, seguir felizmente casada. Es todo como muy bonito ¿no?
Es real. Virgencita que me quede como estoy
Exacto. Ha habido etapas de subidones y otras de intermedios y miras la balanza y se va al traste. Y desde que estoy en Cuatro estoy bien, contenta, cómoda.
Y echas de menos la radio…
Sí. Me encantaría hacer radio, y estar contigo, en la COPE…
Ya lo voy a decir. (Risas)… A mí la radio me parece maravillosa
Es lo más. Pero cuando yo lo dejé, después de 12 años haciendo radio, tenía muy claro que debía dejarlo porque ya no podía. Estaba extenuada y no veía la posibilidad de mejorar las cosas y llegó Cuatro y todo cambió. Pero la radio es genial.
Yo tengo suerte porque nunca la he dejado. Siempre he podido compaginarla de una manera de otra… Espero no dejarla nunca
Es complicado comprometerte con una radio a veces por temporadas completas cando tienes tantas horas de grabación como yo, aunque a mí no me han llamado. (Risa).
Vamos a hablar de moda y a cambiar de tiempo. Tú eres una adicta a la moda…
Bueno ahora soy un poco adicta a ver revistas. A comprar ya no.
¿Y eso?
Hijo Nacho porque está la cosa muy mal.
¿Estás en crisis?
Estoy en crisis, voy a pedir un euro a los españoles para salir de este atolladero. (Risas).
¿Te parece una frivolidad gastar dinero en moda tal y comos estamos?
Es una frivolidad gastar en lo que sea cuando no hay dinero.
En nuestro caso, a parte de que nos guste la moda, es una necesidad porque es la piel que llevamos en nuestro trabajo…
Pero te lo prestan.
A las chicas más que a los chicos
(Risas) Gastar en moda está fenomenal, como en un restaurante, un cochazo, unas vacaciones. Pero si tenemos muchos agujeros que tapar no queda otra que ver las revistas y mucho showroom que te dejen muchos vestidos.
Juguemos a la no crisis. Imaginación. Como hace la moda internacional, en tiempo de crisis vender el exceso para soñar. ¿Qué harías ahora con un cheque en blanco?
Viajaría a China, Japón, lo tengo pendiente. Me encanta viajar. Y de moda me gusta todo hijo. Bolsos, zapatos, ropa, joyas, relojes. Todo. Pero ahora no tengo dinero.
Ya te he dicho que te invitaba yo mujer, que estábamos soñando…
Cuándo nos vamos. Es que tú sueñas con… vamos, hijo mío.
Yo sueño. Es es lo bueno…
Ah bueno.
¿Qué te parece divino en la vida?
Divino es sentirte bien con lo que eres, con lo que haces, con lo que tienes, con lo que sueñas. Y si hablamos de cosas materiales, divino es poder viajar, salir, ir a restaurantes estupendos…
Te gusta comer…
¿No se nota? (Risas). Soy la que más talla tengo.
Pero si estás estupenda… (Más risas)…
No digo que no, pero soy la que más talla llevo.
¿De quién?
De todo el panorama.
En la tele la gente lleva poca talla. Yo es que soy de talla generosa…
Pero ya sabes que en la tele hay poca talla.
Mira eso no me gusta de la tele. Yo no podría ser un esqueleto, tendría que cortarme por algún lado…
Yo un esqueleto tampoco pero hay alguna molla que no la necesito.
¿Y las cenas que nos metemos? Ese placer de salir a disfrutar de la cena…
Claro, por eso no lo sueño, porque lo hago. (Risa).
¿Te gustaría ser madre?
Me encantaría. No ha habido momento. Ser madre es una responsabilidad. No puedes ser madre para a los dos días irte a grabar un programa. Yo cuando lo tenga quiero acompañarle. Ahora es imposible. Pero me encantará.
Entonces tendrás que dejar la tele… por lo que cuentas
No tiene que ser tan drástico Nacho. O blanco o negro, ¡Toma! (Risas).
Pues tendrías que elegir tele más liviana…
Eso sí. Elegir algo que no grabes todo el día. Hay otras formas.
Cuando no tienes tele qué haces… un día normal…
Por suerte últimamente son los menos. Yo es que tengo muy organizada mi agenda. Llamo a mis amigos y les digo, que sepáis que dejo de grabar tal día, y os braseo. No puedo estar sola.
¿Te da miedo la soledad?
Sí. Bueno, miedo no es la palabra, no tengo miedo a muchas cosas pero no me gusta nada estar sola. No me gusta.
Yo era antes a sí y ahora, muchos días, me gusta estar solo, desconectar, y disfrutar de cosas que antes no disfrutaba… ¿A qué tienes miedo?
A no ser feliz. Mucho miedo. Porque pase algo en tu familia, en tu pareja, en tu vida…
Le das muchas vueltas a las cosas…
Muchísimas. Yo a las cosas las mareo. Soy una estresada con todo. Qué pasa, soy así, no hay más.
Estresada, obsesiva, eres una Carrie Bradshaw en toda regla…
Sí. Bueno ya me gustaría. Mira los modelos que llevaba y que feliz y estupenda con su todo oye. Con sus amiguillas.
Pero no tienes imagen de estresada, a pesar de que sé que eres una acelerada
¿Tú crees? Entonces tendré que ser actriz Nacho.
Vamos a estresar o desestresar a algún personaje
Venga.
La Duquesa de Alba…
Me encanta, que haga en cada momento lo que quiere pero… Tu vida es tuya pero también de quienes te rodean. Mi vida es mía pero también es de mis padres que me han dado todo, de mis hermanos que me quieren con locura, y tienes que corresponderles con lo mismo.
Pero esos hijos no siempre han sido generosos. ¿Cómo te sentirías tú?
Supongo que fatal, pero la realidad de la familia Alba la sabe la familia Alba y es complicado juzgar. No sé cómo se sintieron los hijos…
¿Qué te gusta y qué no de la tele?
Lo que menos me gusta es que estamos todo el día maquillados. No me gusta nada. Todo el día tenemos que estar estupendos.
¿Tú en casa estás en bata?
Estoy en chandal…
¿En chandal? (Risas) ¿En serio?
No, te estoy mintiendo. Pero estoy con mi pijama y mi moña aquí. (Se toca la cabeza). Eso me gusta. Y entiendo que en la tele no podemos estar como queremos y que la gente quiere vernos perfectos.
Y lo que más te gusta…
Que la tele te da la posibilidad de estar en contacto constante con el público, porque te ven, te quieren, te dicen de todo. Me gusta la realidad del contacto con la gente. En la radio eso no existe. Y es muy gratificante Nacho. Tú trabajas en la radio y en la tele y sabes lo que es eso. Yo en la tele lo veo así a pesar de no haber tenido un gran éxito…
¿Crees que no has tenido éxito?
Bueno depende de lo que entiendas por éxito.
¿Qué es el éxito?
A ver. Depende. En la vida el éxito es ser feliz. Y en la tele, a nivel público, es que la mayor cantidad de gente sintonice y vea tu programa. Pero en Cuatro a pesar de los éxitos, no es masiva la audiencia.
Pues el éxito en tu trabajo es que la gente sepa lo que haces y que les gustes. Yo creo que eres mujer de éxito. Pero te auguro mucho más…
El éxito sería que hiciésemos un programa juntos, Nachete. Sería genial, todo el día chafardeando.
Ya tuvimos un amago con Lo que diga la rubia, ya llegará, que somos muy jóvenes…
Tremendamente jóvenes.
Un placer querida
Lo mismo, amor.
El mármol de la mesa se enfría bajo las palmas, a pesar del sol de la tarde, porque en la sierra sí existe el otoño. Pero todo es cálido con mi amiga Luján. Lo es porque ella lo hace posible. Al fondo el embalse de Navacerrada se llena de estrellas de luz. Cae la tarde, serena. Muy serena.