Aciertos
1. El vestido flamenco de la novia diseñado por Vicky Martín Berrocal, a pesar de casarse en Salamanca. Impecable compostura.
2. Las calas blancas del ramo de la novia. Pureza.
3. El impactante largo en coral de Arancha del Sol. Intuyo que la etiqueta era "largo opcional" porque así iban casi todas las invitadas.
4. El rodillero azul pastel de Paloma Cuevas. Adecuado.
5. El black&white de Laura vecino. Única forma que vale el blanco y el negro en una boda. Binomio.
6. El berenjena y coral de Rosario Domeq. Evocador.
7. El negro y oro de Jessica Ramírez. Suntuoso.
8. El encaje nazareno de Vicky Martín Berrocal. Nostálgico.
9. El chaleco guinda y la corbata de lunares del novio. Guiños.
10. El tres piezas en azul tinta de Rafael Medina. Dandy.
Errores
1. El farandulero exceso de Cristina Sánchez, lleno de cristales y repollos. Terror.
2. El enlutado total look de Lourdes Montes en una ceremonia religiosa. A pesar de ser divino. Opaco.
3. El negro integral como de diva viuda de la acompañante de Pepín Liria. ¿Dinastía?
4. El verde agua con flores de la mujer de Antonio Romero de Los del Río. Farragoso.
5. La corbata de tapicería morada, pelucón engomado y capa de Morante de la Puebla. Barroquismo.
6. La corbata adamascada de Talavante, que se había debido enfadar con su peluquero. Miedo.
7. Trajes azulones en ellos. Ojo. No todo vale para todos.
8. Caballeros con traje gris de mañana y mujeres de largo noche. Contradicción.
9. Invitadas comunes que extralimitan sus vestidos como de Disney. Pavor.
10. La sombrerera de corazón de la que salieron las palomas de los novios. ¿Necesario?