Cristina de Borbón cumple 60: su DNI no aleatorio, su vestido de boda urgente y más secretos de la infanta
La hija mediana de los reyes eméritos Juan Carlos y Sofía, Cristina de Borbón, celebra este viernes su 60 cumpleaños. Una cifra redonda a la que la exduquesa de Palma y exesposa de Iñaki Urdangarín llega con serenidad y discreción. Esta fecha es la excusa perfecta para que, desde esta bitácora de referencia monárquica, revelemos algunos detalles y curiosidades sobre su vida.
La más traviesa de Zarzuela
Los cronistas reales más veteranos relatan que, durante su infancia, la infanta Cristina era conocida por ser la más traviesa de los tres hijos de los reyes eméritos. Despierta y vivaracha, disfrutaba gastando bromas a sus niñeras, haciéndoles creer que se había escapado. Esta faceta juguetona y extrovertida contrasta con la imagen seria y reservada que ha proyectado en su vida adulta.
Un DNI con superstición
A diferencia de los ciudadanos comunes, los miembros de la Familia Real no tienen un número de DNI aleatorio. La Casa Real reserva los primeros números: en 1951, cuando se emitieron los primeros carnés, el número 1 fue asignado a Francisco Franco, el 2 a Carmen Polo y el 3 a Carmen Franco. A don Juan Carlos y doña Sofía se les otorgaron los números 10 y 11, respectivamente, mientras que la infanta Elena recibió el 12 y Cristina el 14, evitando el 13 por superstición. Curiosamente, doña Letizia conserva el mismo número de DNI que tenía antes de ingresar en la realeza.
Adiós a la verruga
La hermana mediana del rey Felipe VI no es amiga de las operaciones estéticas pero decidió en 2022 pasar por quirófano para retocarse el rostro. Un cambio físico evidente: se quitó la verruga que tenía junto a la nariz. Con este gesto la cumpleañera mejoró cualitativamente su imagen pública e incluso se quitó varios años de encima.
Amante de la música
Cristina heredó de su madre, la reina Sofía, un lado artístico poco conocido. Apasionada por la música clásica, su interés dio lugar a la creación del Concurso de Piano Infanta Cristina y el Premio Internacional de Guitarra de Su Alteza Real Infanta Cristina hace varias décadas. Sin embargo, su gusto musical no se limita al ámbito clásico: también disfruta del pop y ha asistido a conciertos de artistas como Coldplay y Madonna.
Pionera y universitaria
Cristina marcó un hito en la Casa Real española al convertirse en la primera mujer de la familia en obtener un título universitario. En 1989 se graduó en Ciencias Políticas por la Universidad Complutense de Madrid y, más tarde, completó un máster en Relaciones Internacionales en la Universidad de Nueva York. Según sus compañeros de universidad, la infanta tenía dificultades con una asignatura en particular: Estadística, que suspendía "sistemáticamente". Sin embargo, siempre lo tomaba con humor, lo que la hacía ganarse la simpatía de sus colegas.
Deportista olímpica
En los Juegos Olímpicos de Seúl 1988, la infanta Cristina hizo historia al ser la abanderada del equipo español durante la ceremonia de apertura, convirtiéndose en la primera miembro de la Casa Real española en desempeñar este papel. Apasionada por la vela, compitió en la categoría de Tornado, demostrando su destreza, aunque no logró una medalla. Además de la vela, Cristina practica deportes como el esquí y el tenis. Su rol como abanderada fue pionero, no solo por su posición en la realeza, sino también por ser una de las pocas mujeres de la monarquía europea en liderar a su delegación en un evento de tal envergadura, marcando un precedente para la participación femenina en el olimpismo.
Un vestido de boda contrarreloj
En su boda con Iñaki Urdangarín, Cristina lució un impresionante vestido diseñado por su amigo Lorenzo Caprile, una auténtica joya nupcial confeccionada en seda salvaje, con un corpiño ajustado, mangas largas y una cola de tres metros. Según el propio Caprile, la creación del vestido fue un desafío logístico: las pruebas finales se realizaron con prisas y hubo un momento de tensión cuando una pieza clave del bordado no estuvo lista hasta pocos días antes de la ceremonia. Con su calma habitual, Cristina confió plenamente en el diseñador, y el resultado fue un look elegante que marcó tendencia.
Amores y amoríos
Más allá de su matrimonio con Iñaki Urdangarín, la infanta Cristina ha tenido una vida sentimental que ha captado la atención de la prensa. En su juventud, la vela no solo le trajo pasión por el deporte, sino también un flechazo con el regatista canario Fernando León. También se le relacionó con deportistas como el aventurero Álvaro Bultó y el waterpolista Jesús Rollán, así como con figuras como Adolfo Suárez Illana, José Luis Doreste, Juanjo Puigcorbé e incluso Felipe de Bélgica. Tras su divorcio, han surgido rumores sobre una posible relación con un empresario catalán de la alta sociedad.
Madre protectora y cercana
La relación de Cristina con sus cuatro hijos (Juan, Pablo, Miguel e Irene) es cercana y protectora, marcada por un esfuerzo consciente por mantenerlos alejados de la exposición mediática. La infanta ha priorizado el bienestar de sus hijos, fomentando su discreción y apoyándolos en sus proyectos personales. Es una madre dedicada, siempre presente en momentos clave, como los partidos de balonmano de Pablo. Además, ha respaldado las decisiones académicas y profesionales de sus hijos, como los estudios de Juan y Miguel en Londres o el voluntariado de Irene en Camboya, promoviendo su independencia.