Carlos Otero

La ausencia de una tilde en una de las camisetas que ha diseñado la Isa Pantoja –la nueva estrella de MTMAD, por cierto- ponía una vez más en la picota a la también conocida como Chabelita. La prenda, que se ha agotado en tiempo record, lleva sobreimpresa la frase "Comprate una vida" sin la tilde reglamentaria en el verbo comprar. Pero la joven no es la única celebridad con faltas en su escritura y hoy desvelo para ustedes otros famosos que cometen errores ortográficos imperdonables.

Froilán de Marichalar y Borbón es otra víctima de la LOGSE. El hijo de la Infanta Elena revolvía en su tumba a María Moliner poniendo una conjugación del verbo ‘haber’ sin hache en su Instagram. El joven, cuarto en la línea de sucesión al trono de España, publicaba emocionado un comentario a una foto en la que aparecía junto al torero Gonzalo Caballero, tras recaudar una importante cantidad para los enfermos de cáncer, sin reparar en la hache muda de la conjugación verbal: "GRANDE HERMANO!!!!! @gonzalocaballeroo Eres muy grande por lo que as logrado. Y que suene muy alto JUNTOS SOMOS INVENCIBLES!!!"

El olvido de la tilde de la hija pequeña de Isabel Pantoja es ‘pecata minuta’ comparado con el estropicio lingüístico que su hermano Kiko lleva tatuado en su brazo. El primogénito de la Madonna de la tonadilla lleva tatuado un texto que más que ser un proverbio resulta un profundo alegato a las faltas de ortografía: no lleva ni una sola tilde. Ante las críticas recibidas el DJ no tuvo reparo en defenderse: “Los imbéciles en vez de fijarse en el significado se fijan en las tildes...anda ya!!!”, escribió para colapso de los académicos de la RAE.

Carmen Lomana la lío bien gorda intentando ejercer como profesora de Lengua en las redes sociales. La socialité quiso impartir una lección de gramática a un ‘hater’, pero le salió el tiro por la culata: Un joven le imperaba con la correcta forma verbal ‘haz el favor’ y ella pretendía corregirle diciéndole que lo adecuado era escribir ‘had’ (sic). El chascarrillo virtual duró semanas.

Alejandro Sanz también cometió un garrafal error ortográfico. El de Moratalaz escribió en su cuenta de Twitter la palabra ''vuestra'' con b (o sea, “buestra”). El lapsus provocó tal avalancha de críticas y bromas que llevaron al afamado compositor a suspender su actividad en la red social durante varias semanas.

Toño Sanchís, ex manager de Belén Esteban, cometió nada menos que tres faltas de ortografía seguidas en el amago de epitafio que le dedicó a Bimba Bosé en su cuenta de Instagram. El representante escribió “a verte” en lugar de “haberte”, “haya” en lugar de “allá” y se olvidó la tilde en la palabra “estés”. Otro suspenso.

La nueva política tampoco se libra. En Podemos son tan antinormativos que hacen apología de ello en su ortografía. Teresa Rodríguez de Kichi, primera dama de Cádiz y profesora de Lengua Castellana y Literatura en un instituto de secundaria (tócate un pie, María Manuela), rediseñó la grafía del verbo “envasar”, sacándose de la manga la palabra “embasan” para uno de sus múltiples tuits reivindicativos, con uve.

En la misma línea la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, escribió eu un tuit Turquía con "k" y sin tilde y se quedó tan ancha. Señora, una cosa es sentir simpatía por el movimiento ‘okupa’ y otra adoptar sus licencias gramaticales.