Hijo del bicampeón del mundo de motociclismo Sito Pons, Axel ha aparcado la moto y ha pasado de eterna promesa del deporte que a finales de los 80 encumbró a su padre a convertirse en uno de los modelos masculinos más demandados. Andrés Velencoso y Jon Kortajarena ya tienen sustituto oficial.
La pasión por la velocidad corre por sus venas en la misma medida que su gusto por la moda. Este catalán de 1,82 metros de altura y 27 años de edad no solo intenta abrirse camino en el mundo de la imagen, también lo intenta en el campo del diseño: estudia en una escuela de Barcelona y tiene claros sus referentes. “Me fijo en diseñadores que se arriesgan y prueban con materiales distintos, patrones, colores, como por ejemplo el director creativo de Balenciaga y Vetements, Demna Gvasalia”, cuenta en la revista Mad Men.
La cuenta de Instagram de Axel atesora casi 30.000 seguidores y desde ella podemos adentrarnos en la tercera gran pasión del maniquí: los viajes. Marruecos, París, Canadá o la India son algunos de los enclaves que el joven ha visitado en los últimos tiempos y en los que ha dejado constancia en sus redes sociales.
Según contaba en una entrevista que le realizó Martin Bianchi en la revista Vanity Fair, su Curriculum Vitae atesora también un grado en Administración y Dirección de Empresas. “Al final, haber estudiado en la universidad me da otra perspectiva sobre el negocio de la moda”, aseguraba en aquel encuentro.
El mantra “Live Fast” (“Vive deprisa”) decora los dedos índice y corazón de su mano izquierda aunque no se lo toma al pie de la letra: “Una cosa es ir rápido, otra cosa es no tener prisa. En la motos también has de ser calculador y no precipitarte, porque eso te puede hacer cometer errores que luego te arrepientes”, asegura.