Las dos bodas de Fran: encontramos las siete diferencias

Carlos Otero 25/04/2013 18:17

Quedan pocas horas para una de las bodas del año. Francisco Rivera Ordóñez se casa con Lourdes Montes. No es el primer enlace para el ex de Rebeca la de ‘Duro de Pelar’ quien hace quince años daba el “sí quiero hasta que la muerte nos separe” a Eugenia Martínez de Irujo. Dos bodas muy diferentes en fondo y forma. Las analizamos.

La Madrina: Una madre y una hija

La madre de Fran, la gran Carmen Ordóñez, acompañó a su hijo como orgullosa madrina en la boda que lo unió con la Duquesa de Montoro. En la memoria colectiva tenemos aquel vestidazo azulón que lució ‘la Divina’ para desposar a su primogénito y sus lloros literales “a moco tendido”. En la boda de Fran con Lourdes Montes la madrina será la hija del torero, la pequeña Cayetana, de 13 años.

Finca privada frente a Catedral

Como suele ocurrir (salvo en excepciones como la de nuestra princesa doña Letizia Ortiz), las primeras nupcias suelen ser religiosas y las segundas, por lo civil. Este proceder se repite en el caso de Fran Rivera, que a ojos de la Santa Madre Iglesia sigue casado con Eugenia. La boda de 1998 tuvo lugar en la Catedral de Sevilla y por todo lo alto, la de 2013 será en el Recreo de San Cayetano, en Ronda, y será oficiada por el alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido.

La exclusiva: TVE en 1998, ‘¡Hola!’ en 2013

Francisco Rivera Ordóñez ofreció la exclusiva de su emparentamiento con la Casa de Alba a TVE. Según indicaron en un comunicado los entonces enamorados, querían que Televisión Española fuese “la única cadena de televisión que transmita en directo y en exclusiva su enlace matrimonial, debido a las expectativas e interés suscitados por el mismo entre los espectadores”. Su enlace con Lourdes Montes se lo darán, presumiblemente, a la revista ‘Hola’, con la que habrían acordado un pack de reportajes que iniciaron la pasada semana con el anuncio del compromiso.

Los invitados

La segunda boda de Fran Rivera será, sin duda, mucho más discreta que la primera. En 1998 invitaron a 1400 personalidades a disfrutar del bodorrio. En la Catedral se dieron cita personalidades tan dispares como Belén Esteban, Mar Flores, Rocío Jurado o la Infanta Elena, entonces acompañada por Marichalar. En septiembre solo estarán acompañados de “la familia y los amigos de verdad. De los que hace ilusión abrazar en un día como ese", según dice Francisco ‘¡Hola!’

El vestido de novia

La crisis también ha llegado a las bodas VIP. Eugenia Martínez de Irujo acudió al altar vestida por un diseño exclusivo de Enmanuel Ungaro con una diadema de platino, brillantes y perlas que perteneció a la emperatriz Eugenia de Montijo. Lourdes Montes acudirá a su boda vestida de Pronovias. Una marca muy digna pero mucho menos exclusiva.

Discrección plebeya frente a sobrexposición y abolengo

Las novias no sólo se diferencian en el vestido, sino también en su personalidad. Mientras de Eugenia conocíamos toda su vida e incluso su pasado sentimental: Su familia, su educación y hasta sus ex novios (venía de relaciones con El Litri o con Sergio Bayarri aireadas en los medios). Lourdes aporta una naturaleza mucho más discreta. De ella tan sólo sabemos que es abogada, que tiene 29 años, que nació en Sevilla y que tiene parentesco con José Manuel Soto. Poco más.

La cobertura en Divinity

En 1998 no existía Divinity para analizar pormenorizadamente cada detalle del enlace. Por suerte para todos, esta boda la vamos a disfrutar mucho más gracias al siempre inteligente y divertido análisis de Nacho Montes de cómo han acudido los invitados o las informaciones puntuales sobre todo lo que rodea a esta boda gracias a la web líder sobre información de celebrities: Divinity.es.