Si en los años 90 todas las famosas querían grabar discos y ser modelos y en la década pasada se lanzaron a abrir restaurantes como si no hubiera un mañana el nuevo ‘business’ famosil es el de diseñar joyas. No hay famosa sin su propia línea de bisutería. Eso sí, algunas son más feas que el la gargantilla ésa de Catalina la Grande que sale en la Teletienda.
La firma Tous, por ejemplo, encarga a Eugenia Martínez de Irujo su propia línea dentro de la famosa firma del osito, ‘Eugenia by Tous’. “Me encanta ir al taller de Tous, me divierte y me relaja. Un día, buscando entre cajones, encontré unas gemas fantásticas, sencillas pero con mucha personalidad. Empecé a probar con un fino hilo de metal, dándole forma con las manos, buscando la mejor manera de realzar su belleza”, declara la duquesita.
Otra famosa reconvertida en joyera es Elena Tablada. La ex de David Bisbal tiene su propia marca de bisutería llamada ‘Etna’. Según reza la propia web de la marca, “su obra es una rica mezcla de influencias de la india, de donde selecciona una serie de piedras preciosas para elaborar su colección desde su espacio de trabajo en Miami”. Llevar una joya de Elena debe ser algo parecido a tomar LSD porque según prosigue la web, “entrarás en un mundo de felicidad eterna. Tus sueños se hacen realidad. El viaje empieza con un Buda sonriente”.
Algo más finas son las joyas que diseña Vanesa Romero. La modelo, presentadora y actriz (Raquel en La que se avecina), ha diseñado una colección de joyas en colaboración con la firma 'InmaryJo'. Según ha confesado Vanessa, "es un proyecto que tenía en la cabeza desde hace tiempo". Esta línea está compuesta por collares y pulseras de acabado artesanal adornadas con piedras como cuarzo, óniz, cristal de roca, ágatas y turquesas, y fabricadas con materiales como plata, bronce, resina, talco y ganchillo.
Lara Dibildos también se ha lanzado al mundo del diseño joyero y ha amadrinado una colección de la marca austriaca Oliver Weber. “Son diseños para la mujer de hoy que permiten lucir bien en cada ocasión”, declaró la hija de Laurita Valenzuela en un alarde de originalidad.
No sólo las famosas patrias se han metido a hacerle la competencia a Suarez o a Tiffany’s, las celebrities internacionales también se han metido a lanzar líneas de joyería. Llama poderosamente la atención el caso de la cantante Kesha: Su colección ya está a la venta en su página web, donde pueden encontrarse piezas muy originales como puños, pulseras doradas de pinchos, anillos con formas de ojo o calavera.
La ex amiga de Paris Hilton, Nicole Richie, también tiene su propia joyería personalizada. El proyecto le ha llevado siete años a las famosa socialité norteamericana (lo anunció en 2007 y lo acaba de poner en marcha), pero parece que la idea marcha viento en popa. Las joyas de la rica heredera se basa en brazaletes, collares y gargantillas en piel y baño de oro, fabricados sobre patrones clásicos con incrustaciones de piedras y motivos étnicos.
Angelina Jolie diseña joyas pero, como no podría ser de otra manera, con fines solidarios. La buena de Angelina Jolie financia escuelas en Afganistan vendiendo la línea de joyería 'Style of Jolie', que creó en colaboración con el joyero Robert Procop. Procop fue el encargado de diseñar el anillo de compromiso que Brad Pitt regaló a su prometida en abril de 2012.
Acabamos este recorrido con la omnipresente Kim Kardashian que tiene en su emporio la firma 'Kardashian Kollection Jewellery'. La marca cuenta con 25 diseños como pendientes, collares y pulseras diseñadas por ella misma. Para esta aventura, KK se ha aliado con el creador Loren Ridinger. Según éste, "Kim es un icono de la moda y millones de personas se inspiran en su estilo. Por esta razón, nuestra colaboración para la Kollection Kim resulta de lo más natural”.