Nuestras ‘cougars’ de cabecera, Madonna y Demi Moore, han empezado el año como les gusta: con un yogurín al que le doblan la edad en la alcoba. Los afortunados: Timor Steffans (el de la tonadillera de Detroit) y Sean Friday (el de Demi Moore). Quédate con sus nombres porque darán mucho que hablar durante todo este año.
Madonna y su bailarín de sustitución
Moreno, con unos abdominales de escándalo, de mirada penetrante y con la energía de sus 26 primaveras. El nuevo juguetito de Madonna, Timor Steffans, tiene 30 años menos que la de bertsolari de Michigan, quien cumplirá 56 este verano. O sea, para cuando vino al mundo este yogurín, ‘Like a Virgin’ ya era una canción añeja. Al igual que su predecesor, Brahim Zaibat, que lo dejó con Madonna hace un mes, es bailarín de profesión.
Steffans, de origen holandés, pasó la Nochevieja en compañía de su quincuagenaria novia y los hijos de ésta en la fiesta que organiza cada año el modisto Valentino. "La química entre Madonna y Timor era intensa", aseguró uno de los invitados a la fiesta al portal RadarOnline.com.
La proximidad de edad entre Timor y los hijos de la cantante lejos de ser un problema resulta un aliciente para la ex señora de Ritchie. Y es que el bailarín comparte intereses adolescentes con los vástagos de la doña. Entre sus aficiones, como la de cualquier chico de su edad, encontramos la de hacerse ‘selfies’ semidesnudo ante el espejo. “Madonna se pasó la Nochevieja diciendo a la gente que una de las razones por las que le gustaba tanto Timor era porque es muy natural con sus hijos”, declara el indiscreto invitado de la fiesta de Valentino.
El jovenzuelo, que cuenta con los rasgos latinos que tanto le gustan a la intérprete de ‘Love tried to welcome me’, se define en Twitter como “director creativo, coreógrafo y actor”. Antes de caer rendido ante el más de medio siglo de experiencia de la Ambición Rubia ya había trabajado con Beyoncé, Whitney o Usher. Madonna y él se conocieron el marco de un trabajo de videoarte que la ex vocalista de ‘The Breakfast Club’ ha realizado recientemente.
El veinteañero que le toca las baquetas a Demi
El chavalín que le quita las penas a Demi Moore, Sean Friday, tiene 27 años (ella tiene 51) y, por lo visto, lleva varios meses de relación con la actriz. Es el batería de un grupo de rock llamado ‘Dead Sara’, que durante una época fueron teloneros de ‘Muse’.
La actriz y el mozalbete se conocieron entre bastidores de un concierto de la banda, al que Demi fue de acompañando a su hija Rummer, que era la que estaba interesada en la música del grupo.
Si al ‘toy-boy’ de Madonna le gusta hacerse fotos frente al espejo para colgarlas en las redes sociales, al de Demi le encanta colgar vídeos en Vine. En esta red social encontramos un montón de vídeos de seis segundos de duración donde Friday se luce cantando o incluso rapeando.
A Sean le encantan los tatuajes y tiene todo el cuerpo marcado a tinta: El que más llama la atención es uno que lleva en el pecho con un astronauta extendendo unas alas, que también hace las veces logo de su banda de rock. Su compromiso con la música queda reflejado en su costado derecho, donde lleva dibujada una clave de sol. En el brazo izquierdo también lleva un tatu: luce con orgullo una imagen de la supermodelo de Twiggy, una supermodelo los años 60.