Vampirismo famosil: “Cariño, ahora la celebrity soy yo”

CARLOS OTERO 18/09/2013 17:20

Estamos asistiendo a un fenómeno inaudito en el mundo de las parejas del corazón: el vampirismo de fama. Esto es, una celebrity se arrejunta sentimentalmente con una persona más bien anónima y ésta acaba siendo más popular que el famoso original. He encontrado varios casos para sostener mi teoría. Porque mis teorías son todas certeras, demostrables y llenas de raciocinio.

El caso más llamativo de nuestra historia reciente es el de Alaska y Mario. La intérprete de tonadillas tan icónicas como ‘A quien le importa’ o ‘Ni tú ni nadie’ lleva siendo una celebridad de primer término desde hace 30 años. Pues bien, de buenas a primeras y por obra y gracia de su reality show ha llegado su marido, Mario Vaquerizo, y se ha convertido en la estrella del matrimonio.

La líder ‘pegamoide’ parece llevar bien esta nueva situación y no tiene celos hacia Marito. “Precisamente como llevo 30 años siendo famosa, la nueva situación me parece muy bien”, comenta con la sabiduría y racionalidad que le caracteriza. “Me encanta que ahora sea a él a quien le paren por la calle y yo pueda ir un poco más a mi aire”, prosigue. Sin embargo, matiza: “Nunca me ha molestado atender a la gente, para eso soy famosa y me gusta serlo”.

Otra ‘vampira’ de fama es Paula Echevarría. La señora de Bustamante era una actriz desconocida cuando empezó su romance con el triunfito pero poco a poco ha ido tomando su parcela de fama. Por lo pronto, la Echevarría ya tiene más seguidores en Instagram que su maridito: Mientras el ex novio de Begoña Alonso cuenta con 106.000 seguidores, su esposa presume de muchos más followers: 218.000.

La televisiva Belén Esteban también entraría en este grupo vampírico. A finales de los 90, cuando irrumpió en los medios, se limitaba a ser la pareja de Jesulín de Ubrique y madre de su primogénita. El pueblo, que coronó a Belén como su princesa, no quiso que así fuera y actualmente el diestro de Ubrique tiene más poder mediático como “el ex de Belén” que por sí mismo. De la Campanario ya ni hablamos…

En el corazón internacional también hay casos interesantes: Kanye West debutó en el mundo de la música en el año 2004. Con su primer álbum alcanzó los primeros puestos de las listas de ventas y se convirtió en una estrella intergaláctica. Su carrera no ha estado exenta de polémica, como cuando arremetió contra Taylor Swift en unos premios de la MTV.

Sin embargo de nada le han valido a West sus hits, sus videoclips de elevado presupuesto o sus corrosivas declaraciones: Hoy por hoy es más conocido como “el marido de Kim Kardashian”, joven que saltó a la fama hace relativamente poco tiempo por haber sido, a su vez, amiga de Paris Hilton.

La misma analogía la encontramos en la pareja de Cristiano Ronaldo e Irina Shayk. Cuando la modela y el futbolista comenzaron a salir ella era una promesa de las pasarelas de Siberia y el portugués atesoraba botas y balones de oro por doquier. Hoy en día las tornas han cambiado y el extremo madridista comienza su declive mientras que la maniquí rusa no hace más que multiplicar su caché.