La industria de la moda, marca España o no, ha puesto en marcha su maquinaria para ayudar a Tamara Falcó en esa ardua tarea que implica vestirse de novia. Quedarse sin traje a menos de dos meses de su boda con Íñigo Onieva ha sido provocado por un fuerte conflicto con Sophie et Voilà, la marca a la que había confiado el diseño.
Según la firma, la idea que tenía su clienta en mente implicaba "traspasar ciertos límites" que podrían poner en peligro "la autoría original" del mismo. La versión de la aludida era que le cambiaron el vestido sin avisar y que no estaba dispuesta a ceder en un resultado que no cuadraba con sus gustos. Una guerra abierta que ha dejado a la aristócrata, en palabras suyas, "compuesta y sin vestido".
Desde que se supo que se había quedado libre ese inmenso altavoz que supone vestir a la novia del año (y posiblemente de la década), son infinitas las firmas de moda nupcial que se han puesto en contacto con ella para ofrecerle sus servicios. Desde pequeñas marcas hasta grandes emporios como Carolina Herrera, la opción que suena más fuerte en este momento, estarían proponiéndole ideas a contrarreloj. Y Vicky Martín Berrocal, que además es amiga de la novia, no ha querido quedarse atrás en esta carrera por ser la elegida.
Así lo expresa en el vídeo que abre esta noticia, donde se ha postulado para que Tamara Falcó confíe en Victoria, su firma, para llegar al altar el próximo 8 de julio. Aunque el tiempo apremia, la diseñadora ha prometido dar todo de ella para que todo esté a gusto de la novia, que ya verbalizó su agobio por tener que partir "desde cero" después de meses trabajando mano a mano con Sofía y Saoia, las jóvenes que están detrás de Sophie et Voilà.
Además de contar a cámara cuál sería su propuesta, que como es de esperar tendría que tener ciertos toques flamencos (clara seña de identidad de su marca), Vicky Martín Berrocal también ha dado su opinión sobre este desagradable contratiempo. El lanzamiento de su libro 'La felicidad ni tiene talla ni tiene edad', con el que continúa en plena promoción, le impidió enterarse a tiempo real de la que ha sido la noticia rosa de la semana. ¡Hasta se pensó que era una broma cuando se lo contaron los compañeros de Europa Press!