El pasado viernes 13 de junio tuvo lugar la celebración de la boda de Susana Molina y Guille Valle en una finca a las afueras de Madrid. Aunque la propia novia confesó que se sentía casada con el novio desde hace tiempo esta celebración para ella significa "el cambio de etapa mirando al futuro". En esta fiesta del amor, la pareja reunió a familiares y amigos, entre ellos muchas compañeras de profesión como Dulceida, Marta Riumbau y Melissa Pinto, también estuvo Anabel Pantoja quien por descuido publicó una fotografía en la que se desvelaba el vestido de novia, algo que la novia había comunicado que no se vería hasta este miércoles 18, a través de una exclusiva.

En la foto publicada por la sobrina de Isabel Pantoja, que borró después- se podían intuir algunas formas y patrones, pero realmente el detalle se ha visto en la edición de la revista 'Semana', en cuya portada la influencer posa con su ya marido. Gracias a estas fotografías hemos podido saber que el diseño es un vestido desmontable confeccionado en base de crepé de seda con escote halter. Sobre el mismo, una túnica de organza en seda con bordados en chantilly francés. Un diseño firmado por el sello sevillano Claro Couture. Llevó el clásico velo de tul y unos zapatos metalizados de punta cuadrada de Uniq Shoes. 

Estas fotografías han permitido que nos detengamos en los detalles del diseño y se puede apreciar como además del escote halter, se aprecian unos tirantes en la parte más exterior de los hombros que corresponden a ese "segundo vestido" mucho más sencillo, que descubriría después tras quitarse la túnica. No es la primera vez que vemos este detalle en el vestido de novia de una famosa, de hecho 19 años antes ya se lo vimos a Paula Echevarría, en su boda con David Bustamante.

Rosa Clará fue la diseñadora que estuvo a cargo del vestido de novia de la asturiana. En una entrevista en 'La Razón', la diseñadora reveló algunos detalles del proceso creativo de esta pieza: "La preparación de su vestido resultó tan bonita como ilusionante. Ella no traía una idea determinada sino que la fuimos trabajando juntas". El vestido destaca por su cuerpo de encaje, una amplia cola y un largo velo. Se caracteriza por un escote recto tipo palabra de honor con un cuerpo ajustado hasta la caída de la falda, que se extiende como una cola de sirena. A ese palabra de honor se le añaden dos tirantes en la parte exterior de los hombros de la misma forma que los vemos en el vestido de Susana Molina.

María Pombo, otra fórmula de escote con superposiciones

El diseño de Yolancris que María Pombo lució en la ceremonia religiosa de su boda, también jugó con la superposición de piezas en la zona del escote. Optó por un abrigo muy elaborado confeccionado en encaje con transparencias y detalles bordados con pedrería, perlas y canutillos en tonos beige, rosa sutil y blanco. Superpuso este abrigo batín sobre otra pieza con un diseño de estilo deportivo que contrastaba con la anterior.

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