El anuncio de que Lisboa era la ciudad elegida para la luna de miel lo hizo la exmiss España a través de sus stories. Con una foto del 'skyline' portugués, María José Suárez arrancaba su primer fin de semana como casada después de superar la 'resaca' de su boda griega.
La primera parada (de visita obligada, por cierto) fue Monserrate, un impresionante palacio ubicado en la sierra de Sintra que cuenta con un jardín botánico en el que se encuentran más de 3.000 especies de plantas exóticas con las que María José Suárez quiso hacerse una fotografía para Instagram. Con una camiseta vaporosa y unas bailarinas, la modelo se sentó en uno de los árboles milenarios del parque. Lo que no sabía es que, mientras sonreía, un 'intruso' se estaba colando en su plano.
"Me gustaría saber que cosa tan interesante estaba fotografiando Rui Teixeira para estropearme la foto de Jordi Nieto", ha ironizado la novia en una publicación de Instagram en la que, si nos fijamos en la parte derecha de la imagen, se puede ver a su amigo tomando una fotografía paralela a la de María José.
Entre visita y visita, Suárez y Nieto han apostado por el hotel palacete del Chafariz D'El Rey para descansar (y desayunar un menú no apto para amantes del buen comer). Una "maravilla" ideada por su amigo Emilio Castillejos en la que Jordi, el marido de la exmiss, le hizo una cata de vinos. "Gracias por regalarnos momentos tan especiales. Me voy con el ❤️ contento. Hasta pronto, Lisboa", ha escrito en redes sociales a modo de despedida.
Antes de poner rumbo a Lisboa, María José Suárez y Jordi Nieto disfrutaron de su primer regalo de bodas. Un día en los baños árabes Aire de Sevilla en el que la pareja disfrutó de unas espectaculares vistas a la Giralda. Fue un detalle por parte de la también modelo Raquel Revuelta, una de las grandes ausencias del enlace debido a que se encontraba en Indonesia, donde un seismo convirtió su escapada en una de las peores experiencias de su vida.