Francisca Perelló, conocida como Mery o Xisca, entró en la vida de Rafa Nadal por ser la íntima amiga de su hermana (los dos son de Manacor, ciudad y municipio de la isla de Mallorca, donde también vive la familia de ambos). Años más tarde, comenzaron una relación a la que, 14 años después, van a ponerle el broche de oro con una boda que se celebrará en otoño en Mallorca, según ha anunciado en exclusiva la revista '¡Hola!'. Al parecer, la pareja se comprometió el pasado mes de mayo en un viaje que realizaron a Roma y, desde entonces, la noticia del enlace se ha mantenido en secreto por parte de todos aquellos que lo sabían.
O Mery, como la llama su entorno cercano. Tiene 30 años, es hija única y hace nueve años se licenció en Dirección y Administración de empresas. Después de trabajar en empresas importantes como Mapfre, actualmente es la directora de Estrategia y Relaciones Institucionales de la fundación de Rafa Nadal. La buena relación con la madre del tenista es evidente, como podemos comprobar en las imánges de ambas animando a Rafa desde las gradas y, además, trabajan mano a mano (la madre es la presidenta de la fundación).
Fue en el año 2005 cuando Rafael Nadal consiguió su primer Roland Garros y allí estaba Xisca, celebrando la victoria de su chico. A día de hoy, 14 años después de ese momento, han celebrado juntos las 11 victorias que el tenista ha ganado en este mismo torneo. En todos estos años de relación, Xisca ha demostrado ser una persona que se mantiene al margen de las cámaras y los medios, manteniéndose siempre en un segundo plano. Su prioridad es su chico y le sigue en cada uno de sus partidos animando y apoyando desde la grada.
Durante estos 14 años de relación han sido muchas las ocasiones en las que algunos medios han comentado extrañados que la pareja no hubiese dado el paso de casarse e incluso, han salido rumores de posibles bodas que el propio tenista ha desmentido. Hace algo menos de un año, durante su estancia en México, Rafa Nadal apuntó: "Evidentemente, tengo la intención y la ilusión de formar una familia. Me encantan los niños y me gustaría que mis hijos hicieran lo que a ellos les guste".
La pareja comparte la pasión por los deportes pero también tienen los dos un gran lado solidario. Xisca, desde el año 2010, está implicada en un centro de entrenamiento de tenis para niños y niñas en Anantapur, una ciudad de la India. También, junto a su prometido, colaboran en proyectos de integración social que la fundación del tenista impulsa en España y en la India.
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