Silvestre, romántico o delicado: siete ramos de novia naturales con flores de otoño
Por su simbología, el ramo de novia es uno de los accesorios que mayor protagonismo acapara el día de la boda
Además del blanco, las novias de otoño suelen apostar por un colorido con predominio de tonos amarillos, naranjas, marrones y burdeos
El ramo puede ser de flores naturales o preservadas, los primeros son más efímeros y los segundos pueden durar meses e incluso años
El ramo de novia es uno de los accesorios que mayor protagonismo acapara el día de la boda, tanto por la propia simbología de las flores, como por la que lleva aparejada la tradición de regalarlo a la próxima futura novia.
El ramo es un reflejo de la personalidad y gustos de la novia y su composición se elige con tanto mimo que muchas chicas deciden encargar una réplica exacta para regalar en la boda, reservando el original para secarlo y conservarlo como recuerdo.
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El ramo puede ser de flores naturales o preservadas, los primeros son más efímeros que los segundos, que pueden durar meses e incluso años sin demasiados cuidados, pero no todas las flores pueden ser sometidas al proceso de preservación.
En cualquier caso, lo ideal es elegir por flores de temporada y en otoño cuentas con una gran variedad de plantas, entre las que destacan las dalias, las craspedias, la margarita manzanilla, los crisantemos o el limonium, sin olvidar algunas especies que sirven como relleno, entre otras eucalipto, astrantia, flor de arroz, astibe, viburnum o paniculata.
Las novias de otoño suelen apostar, además de por el clásico blanco que o falla, por el colorido que ofrece la naturaleza en esta época del año, con predominio de tonos amarillos, naranjas, marrones y burdeos, aunque existen otras muchas opciones que van del romanticismo de los tonos pastel, a la fuerza de los ramos silvestres. Estas ideas te ayudarán a elegir el ramo más adecuado para el día D.
Un ramo lleno de energía
Este ramo creado por Mar de Flores está compuesto principalmente por girasoles, una flor que encaja con una novia de estilo boho y que supone un chute de energía positiva solo apto para mujeres con mucha personalidad.
Un ramo silvestre
Las flores silvestres son un acierto para novias de estilo relajado. Este de Flores en el columpio, que tiene como protagonista a la margarita manzanilla, es especialmente adecuado para una boda en el campo.
Un ramo romántico
Las rosas blancas son una elección acertadísima si buscas un ramo que desprenda romanticismo. Mezclar varias especies es la apuesta de Chitina para crear un ramo sencillo pero lleno de misterio.
Un ramo delicado
Las anémonas son flores muy frágiles, por eso son las flores perfectas para novias que buscan un toque de candidez. Botanyco las ha mezclado con eucalipto y vivurnum para crear un ramo delicado, pero con mucha fuerza.
Un ramo de flores frescas
Este ramo creado por Dilo con una flor fue un trabajo hecho a medida para una novia que buscaba flores frescas para el día de su boda. Una composición a base de lirios del valle, astilbe, boubardia y un pequeño toque de verde.
Un ramo con sabor vintage
A veces, las cosas más sencillas resultan ser las más adecuadas y este ramo creado por La Florería con Dalias café Au Lait y olivo resulta más que perfecto como complemento de un vestido de aire vintage creado a partir de tejidos antiguos.
Un ramo de color
Los colores del otoño, con sus burdeos y naranjas, son la inspración de este ramo creado por Vendrell en el que el astilbe blanco y burdeos comparte protagonismo con el verde del eryngium y el melocotón de las peonías.