Las siete diferencias entre la reboda cíngara de Tamara Gorro y su primer enlace

1. A la de 2012, que también se celebró recién estrenado el verano (24 de junio), acudieron trescientos invitados. Un bodorrio tradicional que dista mucho del segundo, en el que la pareja ha decidido darse el 'sí, quiero' solos, con la simple presencia de su tía y su pareja como testigos.

2. De Alcalá de Henares, con convite y carro de caballos incluidos, Tamara y Ezequiel se han trasladado a las Maldivas. Con todo lo que eso implica. Arena, mar de fondo y desconexión.

3. El vestido de ella tiene mucho más en común con el primero de lo que parece. Ambos destacan por el encaje. El de esta vez, con un toque cíngaro, con tirantes y espalda al aire. El primero, mucho más elaborado, tenía cola, forma sirena, escote palabra de honor y chal de flores.

4. Hace cinco años, una de las cosas que más llamaron la atención fue la ausencia de velo. Como sustituto, un pequeño tocado de plumas que contrasta con el de esta ocasión, de estilo 'gipsy bride'.

5. Las joyas también marcan la diferencia. Del pendiente sencillo de 2012, la presentadora ha convertido los complementos en el protagonista de su outfit.

6. Ezequiel Garay, que esta vez ha escogido un look ibicenco, con cuello mao y prendas sueltas, también fue de blanco en su primera boda. Aquella vez, sin embargo, el futbolista optó por el diseñador Félix Ramiro para un 'total white' en zapatos, pantalón, camisa, chaqueta, chaleco y corbata (XXL).

7. En estos cinco años, a la pareja les ha cambiado la vida (y mucho). Su sueño de convertirse en padres se ha cumplido... ¡y por partida doble! La primera en llegar fue Shaila, que nació a través de un proceso de gestación subrogada. Después, cuando Tamara se quedó embarazada de forma natural, apareció Antonio. Y puede que haya tercero: en su programa, Gorro confesó a Albert Rivera que ella y Ezequiel tienen en mente adoptar.