La llamativa actitud de Leonor con la reina Sofía en la Confirmación de su hermana

La infanta Sofía se ha confirmado hoy en la parroquia de la Asunción de Nuestra Señora, en Aravaca, junto a sus compañeros de cuarto de la ESO del colegio Santa María de los Rosales. A las 12:30 horas, muy puntuales, la familia real llegaba a la entrada de la parroquia junto a Sofía, la reina emérita, Jesús Ortíz (que acudía también con su mujer) y Paloma Rocasolano, padres de la reina Letizia.

A diferencia de la Confirmación que protagonizó su hermana Leonor, este año no han tenido que recurrir a las medidas sanitarias que en 2021 se llevaban a cabo por la pandemia. En aquel momento solo podían acceder un número reducido de personas, los padres y hermanos. Sin embargo, hoy Sofía ha estado acompañada también por sus abuelos maternos y paternos, a excepción del rey emérito que se encuentra fuera de España.

En su llegada a la parroquia, la infanta Sofía ha saludado a todos los que allí se encontraban (medios de comunicación y ciudadanos que han querido presenciar el momento). Vestida con un mono de color fucsia y zapato plano, la hija pequeña de los reyes aseguraba estar algo nerviosa minutos antes de dar comienzo la ceremonia. Tras el posado familiar, Leonor ha tenido un destacado gesto con su abuela, la reina Sofía. La princesa Leonor ha prestado especial atención a su abuela y, tal y como puedes ver en el vídeo que encabeza esta noticia, la ha abrazado para entrar juntas a la iglesia.

El importante papel de Leonor en la Confirmación de su hermana Sofía

Aunque esta vez no le tocaba a ella ser protagonista, Leonor ha ocupado un rol importantísimo en el gran día de su hermana menor: la princesa, que ya ha vuelto a España tras su intenso periplo por Gales, ha ejercido de madrina de Confirmación de la infanta.

Esta es una elección expresa de la confirmada, que no puede escoger para esta función a ninguno de sus progenitores. Además de ser mayor de edad y de haber pasado por este mismo sacramento, lo que exige la Iglesia Católica es que esta persona suponga un referente de fe para el confirmado, en este caso para Sofía de Borbón.

La actitud de las infantas con la reina Sofía, en el punto de mira

Esta escena sucede pocos días después de que Pilar Eyre, periodista especializada en Casa Real, asegurara en la revista Lecturas que a Letizia "no le dio la gana" invitar a la reina Sofía a la Graduación de su hija Leonor, a pesar de tener cuatro invitaciones, puesto que no estaba dispuesta a que estuviese su suegra y no Paloma Rocasolano, abuela materna de las niñas, que mantendría más relación con ellas.

Por lo que es inevitable que este gesto nos recuerde al que tuvieron Letizia y sus hijas con la reina emérita una semana después del famoso rifirrafe en la catedral de Palma, cuando la mujer de Felipe VI se interpuso entre su suegra y sus hijas para que no se hicieran una foto que, supuestamente, la emérita quería para su álbum personal.

La actual monarca abrió la puerta del coche en el que la familia real a su llegada al hospital donde se encontraba ingresado el rey Juan Carlos tras su operación de rodilla. Un acto simbólico que fue entendido como una forma de pedir perdón públicamente o de desmentir una posible mala relación, como apuntaba la Casa Real, que mantiene que se magnificó este desencuentro. De hecho, tras bajarse del auto que los trasladó al centro, la reina cogió a sus nietas de la mano, dio unos pasos junto a ellas y posó junto a ellas para los fotógrafos, zanjando así la polémica.