Tras la muerte del príncipe Karim al-Husayni el 4 de febrero de 2025 surgieron muchas dudas, la primera de ellas fue quien sería su sucesor como Aga Khan. Esto quedó claro en su testamento, donde nombraba a su primer hijo varón como su heredero y, de esta forma, poco tiempo después el príncipe Rahim era entronizado. 

Esta sucesión podría parecer lógica, pero lo cierto es que no siempre se ha seguido la línea recta a la hora de designar al sucesor, Karim fue nombrado directamente por su abuelo, porque consideraba que era el momento de que ocupara el puesto un hombre joven, que se hubiera criado “en medio de la nueva era”, según se recoge en diferentes medios. 

Rahim llevaba tiempo preparándose para ocupar el lugar de su padre, que murió a los 88 años, hacía años que trabajan codo con codo, aprendiendo las responsabilidades y deberes que ahora tendrá que asumir como Aga Khan, pero ¿qué funciones le corresponden y qué se espera del quinto Aga Khan?

Aga Khan es el título que reciben los imanes de los ismaelitas nizaríes del chiismo. Es un término que se emplea como señal de nobleza, Aga es un término de respeto y Khan, el título que se otorga al soberano. El quinto Aga Khan es el 50º imán de los musulmanes ismaelitas nizaríes y también se le considera soberano de un reino sin territorio, lo que no impide que tenga reconocimiento de jefe de Estado por parte de la comunidad internacional. 

El linaje del imán de los ismaelitas nizaríes entronca directamente con el Profeta Mahoma, pero no se reconoció con el título de Aga Khan hasta 1818. El primer Aga Khan recibió el título de ‘Alteza’ de la reina Victoria del Reino Unido en 1886, en 1957 fue Isabel II quien otorgó este título a Karim al-Husayni, el IV Aga Khan, y ahora ha sido Carlos III quien ha hecho lo propio con el V Aga Khan. 

En su ceremonia oficial de ascenso al trono, que, además de ser un evento privado, ha sido un acto mucho más discreto de lo que suele ser habitual en este tipo de eventos, los líderes de la comunidad ismaelita de todo el mundo han jurado lealtad a su nuevo imán.

Esta ceremonia ha sido celebrada en Lisboa, porque aquí es donde se estableció la sede mundial del Imamat ismaelí, un acuerdo al que se llegó tras una larga negociación en la que intervinieron varios países, el gobierno luso y el Aga Khan, tal y como recogen en El Mundo. Una vez finalizado este trámite y celebrado un funeral por su padre en Portugal, el nuevo Aga Khan se desplazó hasta Egipto junto a su familia, para enterrar al príncipe Karim en Asuán, en el Mausoleo del Aga Khan.

El Aga Khan, además de líder de los ismaelitas, es también el heredero de los negocios y la fortuna familiares, que tras la muerte del IV Aga Khan le pertenecen a él. 

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