Flores, muchas flores y en todos sitios

Mires donde mires, ahí que se repite estampado. A excepción de Pedro Sánchez, los otros tres protagonistas del posado han decidido explotar el mundo 'flower power' para un acto oficial que, por el mes y el lugar en el que se ha celebrado, tiene más de un toque informal. Puede que sea fruto de la casualidad, pero que tanto Letizia como Begoña hayan apostado por dos vestidos de flores es una cuestión a reseñar. Este mismo motivo también ha sido escogido por Felipe que, en su caso, ha decidido utilizarlo en la corbata.

Los colores también cuentan

No solo las flores han hecho que este posado sea diferente a otros. Los tonos, llamativos y muy veraniegos, priman en cada uno de los componentes. La reina Letizia ha explotado el rojo, un color que concuerda con el corte del traje, vaporoso, de inspiración asiática y con escote cruzado. Begoña, por su parte, ha apostado por un estampado mucho más marcado, en azul y blanco, para su vestido de vuelo y sin mangas. Tanto el Rey como Sánchez, el primero con y el segundo sin estampado, han coincidido en las corbatas, ambas en tono berenjena.

Por si no había coincidencias, el calzado se lleva la palma

Para contrarrestar tanto colorido, tanto Letizia como Begoña han apostado por la sobriedad en el calzado. Una idea que demuestra que, aunque en lo que es el outfit reflejan personalidades opuestas, en cuestiones de tacones no son tan diferentes como parece. Ambas llevan blanco roto y aguja. ¿La única diferencia? El talón de la Reina, que está descubierto, a modo sandalia. Ah, y el pie de la Primera Dama, discretamente por delante del de los otros tres protagonistas de la foto.