La casa de Joaquín Sánchez a las afueras de Sevilla: amplia, moderna y con piscina

Veinte años han pasado desde que Joaquín Sánchez y su mujer, Susana Saborido, se conocieron a través de un amigo en común. "Una noche, hablando, le dije 'Hola Joaqui, ¿cómo estás?'. Y me dice: '¿Qué haces hablando conmigo si tú a mí no me puedes ver?'. Y a raíz de ahí empezamos", contó ella hace unos meses en el programa 'El show de Bertín', en Canal Sur. Tras tres años de noviazgo, y a pesar de que ella no se fiaba de él en un principio, la pareja se dio el 'sí, quiero' en el Puerto de Santa María, en Cádiz.

Juntos han formado una familia con sus dos hijas, Daniela y Salma, que tienen quince y doce años respectivamente. Y desde hace unos años, el capitán del betis y su familia viven en un chalé en la urbanización Simón Verde, en la localidad hispalense de Mairena de Aljarafe, a las afueras de Sevilla.

Si por algo se caracteriza Joaquín es por su sentido del humor. A través de sus redes sociales - donde alcanza más de cuatro millones de seguidores -, el deportista publica a diario vídeos divertidos en los que también deja ver rincones de su casa. Además, hace unos años, Sánchez acudió al programa 'Mi casa es la tuya', de Bertín Osborne, donde pudimos ver con todo detalle cómo es y cómo tiene decorado su chalé.

Amplio jardín y piscina

Si algo define a esta casa es la amplia parcela de la que pueden disfrutar. Tal y como se puede ver, el futbolista, su mujer y sus dos hijas cuentan con un gran jardín y una piscina descubierta. La finca está totalmente cubierta por plantas, árboles y arbustos que impiden que las personas que están fuera puedan ver la intimidad de la familia. Además, para disfrutar de los días de verano y calor, el capitán del Betis tiene varias tumbonas de color blanco que decoran el jardín y también un porche.

El salón tiene una gran cristalera por la que pasa la luz y los muebles son de color blanco. Para contrarestar con la decoración, la alfombra es en un tono grisáceo y la pared está cubierta por un gran cuadro de cebras. También en esta planta baja tienen la cocina, que cuenta con una isla en el centro. Y otra de las cosas que más protagonismo tiene en el salón es la impresionante escalera de madera y barandilla de cristal por la que suben a la otra planta de la casa.

Arriba disponen de la habitación de matrimonio y las habitaciones de sus hijas, que nunca han querido mostrar públicamente, varios baños y unas impresionantes vistas al resto de la urbanización.