La increíble casa de Andrés Iniesta y Anna Ortiz en Japón: en un rascacielos, con pista de fútbol y espacios abiertos

  • El futbolista y su pareja, Anna Ortiz, viven en Japón desde 2018, cuando Andrés fichó por un equipo de la liga nipona, en un espectacular piso

  • Vistas sobre la bahía, espacios abiertos, tonos claros, abundancia de madera y estilo rústico y funcional: así es por dentro la casa de Andrés Iniesta y Anna Ortiz en Japón

  • Andrés Iniesta y Anna Ortiz comparten la primera foto de sus cinco hijos juntos

En 2018, Andrés Iniesta fichaba por el Vissel Kobe, uno de los equipos de la liga nipona de fútbol, y ponía rumbo a Japón para iniciar una nueva etapa profesional y vital. La familia que ha formado junto a Anna Ortiz lleva instalada ya cinco años en el país. Allí han nacido los dos hijos más pequeños de la familia, Romeo en 2019 y la benjamina Olympia hace solo unas semanas; las mayores, Valeria, Paola Andrea y Siena, nacieron en España. El futbolista ha dicho en alguna ocasión que ya considera al país asiático como parte de su vida, esa de la que tanto él como Anna suelen dar buena cuenta en redes sociales. Pieza clave de su día a día allí es su espectacular piso: así es por dentro.

Las muchas estampas familiares que Iniesta y Ortiz comparten en sus respectivos perfiles de Instagram han permitido que sus seguidores puedan hacerse una imagen fiel de cómo es el interior del piso en el que viven, situado en la ciudad japonesa de Kobe, una de las más pobladas de país, así como un centro económico importante. La casa, de la que se desconocen datos como el número de metros o el precio, presenta varias características propias, que se repiten en las distintas estancias.

Así es por dentro la espectacular casa de Andrés Iniesta y Anna Ortiz en Japón

Uno de los rascacielos más altos de la urbe acoge el domicilio de los Iniesta-Ortiz actualmente, tras alguna mudanza y diversos problemas para encontrar lo que buscaban. La increíble altura permite ofrecer, desde una amplia terraza, unas espectaculares vistas sobre la ciudad y el mar que la rodea. En el interior, la apuesta por los tonos claros, los espacios abiertos o la abundancia de metros son algunas de las principales notas de la vivienda.

La estancia principal es una habitación muy amplia y alargada, que cuenta con dos zonas de salón, otra de comedor, y una cocina, en un impresionante espacio abierto y con vistas. Todo ello, gracias a una enorme cristalera en una de sus cuatro paredes. La luminosidad es la nota dominante, potenciada por el blanco de las paredes y el tono claro de la madera del suelo.

Los dos salones de la casa de Andrés Iniesta en Japón

En la primera zona de salón predomina un estilo cálido. Situado de espaldas al ventanal, un gran sofá de color beige es el principal protagonista de la misma. El tono se repite en muchos de los elementos de la estancia, como las cortinas, o el color de las sillas. En este espacio se encuentran también un pequeño piano en color claro, alguna mesa de madera y tono rústico, otras butacas y distintos jarrones y elementos decorativos.

El segundo salón lo forman, frente al anterior, varios sillones de color gris marengo dispuestos en forma de ele, cubiertos con cojines de distintos tonos, y que completan un par de mesas bajas negras, y una gran alfombra en color crudo. Delante de ellos, el televisor, dispuesto sobre un mueble blanco con mucho espacio de almacenamiento, y otros elementos como una butaca turquesa, cuadros o lámparas.

La cocina y el comedor de Andrés Iniesta, abiertos y en tonos beige

La cocina se sitúa al fondo de esta estancia abierta, y mantiene las notas comunes al resto de la casa. Con mucha zona de almacenamiento al descubierto, los electrodomésticos integrados y la mayor parte de mobiliario en tonos crudos y beige, cuenta también con abundante luz natural. En ella destacan las estanterías en forma de columna que cubren las paredes y esquinas, así como una mesa alta de madera, rodeada de sillas altas en gris aterciopelado.

El comedor se encuentra en el extremo opuesto al de la cocina, dentro del mismo espacio abierto, y con el extenso ventanal con vistas como telón de fondo. La mesa es el principal elemento, en madera, estética rústica y color miel. A su alrededor, varias sillas que mantienen el estilo de las presentes en la cocina: textura aterciopelada y tonos grises.

El dormitorio con vistas de Andrés Iniesta y Anna Ortiz

Otra de las habitaciones que ha aparecido en las publicaciones de redes de Andrés y Anna es el dormitorio principal. Una estancia también amplia, con suelo de madera y paredes blancas, con un impresionante ventanal, en las que el rosa y el gris toman el protagonismo. La cama, grande y con cabecero beige, tiene la ropa en estos tonos y descansa sobre una alfombra en tonos claros. Está flanqueada por sendas mesillas de madera y estilo moderno con lámparas blancas. Otros elementos presentes en el cuarto son un gran espejo, algunos pequeños sillones y un mueble bajo.

El increíble cuarto de juegos multiusos de Andrés Iniesta y Anna Ortiz

El cuarto de juegos de sus hijos es otra de las estancias más conocidas por los seguidores de la pareja, que funciona como un espacio multiusos y versátil en el que la familia también practica ejercicio o celebra fiestas y aniversarios.

Cuenta con una gran zona central, liberada de mobiliario y cubierta por una alfombra gigante en color crudo. Alrededor de ella y pegados a las distintas paredes y al ventanal se distribuyen distintos muebles, como mesitas, elementos de almacenaje o un gran televisor, y multitud de juguetes de los niños.

La terraza con pista de fútbol y vistas sobre la bahía de Osaka de la casa de Iniesta en Japón

La terraza es uno de los grandes atractivos de la vivienda. Cuenta con un rincón amueblado, de pequeños azulejos blancos, con butacas y distintos elementos decorativos.

Además, incluye un enorme espacio cubierto con césped, simulando una pequeña pista de fútbol, en la que Iniesta juega en ocasiones con sus pequeños.

También una zona totalmente despejada, que da buena cuenta de las espectaculares vistas de la casa, desde la que se aprecian un sinfín de rascacielos de la ciudad de Kobe y buena parte de la bahía de Osaka, con el mar al fondo. En ella, en ocasiones, han instalado una piscina portátil.