La mesa plegable que necesitas si tienes un piso pequeño: funcional, práctica y versátil
Esta mesa es una de las soluciones de espacio y almacenaje más inteligentes de la firma sueca
Siete productos de Ikea por menos de 40 euros que parecen de lujo
Tener un piso pequeño es perfectamente compatible con que esté bien decorado. Pero no es solo cuestión de estilo. Esta decoración, además, tiene que ser práctica y funcional. La clave está en saber elegir cada mueble con mucho cuidado, porque cada milímetro cuenta. Literalmente. Esto te puede llevar más tiempo que decorar una casa con espacios amplios y diáfanos, cierto. Pero si sabes encontrar esas piezas que encajen como un puzle, la sensación de hogar será mucho más placentera.
Una de las mejores soluciones para ganar espacio en pisos pequeños son los muebles multifuncionales, es decir, aquellos a los que puedes dar varios usos. Su máximo exponente es el sofá-cama. Otra idea de lo más práctica son los espacios de almacenaje extra ocultos en el mueble. Por ejemplo, un puf con tapa que sirve a su vez como revistero.
Otra solución serían los muebles plegables que, mientras no los estás utilizando, quedan recogidos dando mayor amplitud a cualquier espacio de la casa. Y sin encima, se pueden cambiar de sitio porque no van anclados a ninguna pared, entonces haces pleno. Ikea ha unido todos estos conceptos (es decir, mueble multifuncional, con almacenaje extra, portátil, y además plegable), y nos ha sorprendido con la mesa NÄSINGE (Ref. 205.875.37), que arrasa en ventas por un precio increíble teniendo en cuenta todas sus funciones: 179 euros.
Así es la mesa plegable de Ikea que necesitas si vives en un piso pequeño
De diseño minimalista, tiene dos hojas plegables cuyo uso es independiente. Su capacidad es de una a cuatro personas, según si necesitas desplegar una hoja o las dos. En contra de lo que pueda parecer, la estabilidad de la mesa no peligra si solo necesitas desplegar una de las dos, porque se trata de un mueble sólido y resistente.
En el hueco entre las dos hojas tiene un espacio de almacenaje, donde puedes mantener bien ordenado todo aquello que conviene tener a mano, según el uso que le quieras dar a la mesa. Si es el de mesa de comedor, puedes guardar objetos básicos como el mantel y las servilletas, y si la utilizas como mesa de trabajo, te vendrá de perlas para colocar el portátil o la tablet, cuadernos o revistas. Además, su interior está pensado para guardar dos sillas plegables como pueden ser las de los modelos Frösvi, Gunde o Nisse.
Como no va anclada a ningún sitio, puedes moverla por la casa y acoplarla en el sitio que te sea más útil. Desde el salón comedor a la cocina o a tu despacho de trabajo. Su diseño en blanco es tan sencillo y versátil que combina a la perfección con cualquier decoración y no desentonará en ninguna estancia. Cuando la tengas cerrada, simplemente coloca una maceta o cualquier otro elemento decorativo y sitúala pegada a la pared.
Su robusta estructura es fuerte, y el tablero, de melamina blanca, combina con el resto del mobiliario. La altura es de 75 cm, la anchura es de 85 cm y la longitud máxima es de 159 cm. Si la mesa está plegada por ambas partes, solo ocupa un espacio de 48 cm. ¡No se puede pedir más por menos!