Carlos Latre recuerda las dos veces que se ha arruinado económicamente: "Malas decisiones"

Él mismo se define como "el hombre de las mil caras" y, aunque le conocemos por imitar a cantidad de rostros conocidos, poco sabemos realmente de él. Carlos Latre comenzó en la televisión con tan solo 19 años, cuando al que él considera "el padre", el conocido Javier Sardá, le dio la oportunidad de sentarse a su derecha para formar parte de 'Crónicas Marcianas'. Aunque su paso por el programa le hizo saltar a la fama y abrir paso a una gran carrera profesional, poco después vivió un fracaso que le llevó a dos ruinas económicas de las que, como todo, supo sacar el lado bueno y le sirvió para reinventarse. De todo esto ha hablado en una charla con Vicky Martín Berrocal en 'A solas con...'.

El cómico ha recordado que se arruinó dos veces "por malas gestiones o malas decisiones". Cuando acabó 'Crónicas Marcianas' fichó por lo que entonces era la nueva televisión de Cuatro, que le planteó grabar tres temporadas de un nuevo programa. "No es culpa de nadie, soy yo el que decide realizar esos proyectos", se ha adelantado a explicar el artista. Carlos Latre tomó la decisión de adelantar económicamente esas tres temporadas, pagando así vestuario, maquillaje y "todo". "De repente, en el programa 5, la serie estaba fuera. Hay un día que llego a casa y digo: 'No tengo ni para pagar el alquiler, bueno la cuota de la casa'", recuerda.

En aquel momento cuando, en sus propias palabras, "estaba en la mierda", Latre considera que es cuando más temple tiene. "Le dije a mi mujer que no se preocupase, que iba a hacer una gira. A partir de ahí me di cuenta de que no podía depender de la televisión, no podía tener un solo cartucho. Ahí cambié de manager, empecé a hacer teatro y me empecé a ver a mí mismo como una marca, un producto. Quería tener estrategia, marketing, saber cómo iba a estar dentro de unos años", explica el cómico sobre los cambios que hizo en su dinámica de trabajo.

La segunda ruina económica de Carlos Latre

El cómico venía de 'Crónicas Marcianas', de ser "el rey del mambo", cuando se encontró con esa ruina económica. Fue entonces cuando aquel palo de la vida le sirvió para darse cuenta de que no podía depender solo de la televisión y de que lo que él hacía podía seguir desarrollándolo en un programa o en el metro si era necesario. Fue entonces cuando llegó la segunda ruina, pero la vivió "desde otro punto de vida". A raíz del primer golpe ya tenía diversificada su carrera y no fue una ruina total, como la primera, si no que fue una debacle económica. "Desde entonces no tengo empresas grandes, tengo empresas unidireccionales que se cruzan unas con otras, si cae una no pasa nada. Fue un gran palo, pero ya tenía capacidad de reinventarme al día siguiente. Después de eso volví a hacer una gira, un programa, etc", ha contado el cómico.