{{#section.link.href}}
{{section.link.title}}
{{/section.link.href}}
Todos conocemos las canciones de Céline Dion. Su música nos lleva acompañando desde hace años y la cantante ha sido capaz de crear la melodía perfecta para cada momento de la vida. Y eso sí, aunque su trayectoria profesional es más que conocida, la artista siempre ha querido mantener su parcela más privada en un segundo plano.
Céline conoció a su representante, y al que sería su esposo, René Angelil, en 1980. En ese momento, ella tenía 13 años y él, 38. Ambos comenzaron su relación siete años más tarde y se comprometieron en 1991. Decidieron poner el broche en su relación el 17 de diciembre de 1994 con una boda en la basílica de Notre-Dame, en Montreal (Canadá). Luego, decidieron renovar sus votos en enero de 2000 en Las Vegas.
Por ese tiempo, tanto Céline como su marido decidieron ampliar la familia. Para ello la cantante se sometió a un par de intervenciones en una clínica de fertilidad en Nueva York. Aún así, la pareja acabó decantándose por la fecundación in vitro. Su primer hijo, René-Charles Angelil nació el 25 de enero de 2001.
En estos 20 años, el joven siempre ha mantenido un perfil muy discreto. Eso sí, sabemos que ha sido muy bueno jugando al hockey y, también, al golf, una pasión heredada de su padre. Hace unos años, René decidió que quería dedicarse a la música y para ello buscó un nombre artístico; Big Tip fue el nombre elegido y publicó tres canciones, que se colocaron entre el número uno. Dentro de la música, al joven le interesa mucho el rap y es un gran fan de artistas como The Weeknd.
La juventud de René no fue especialmente fácil. Tanto él como su madre cuidaron, durante muchos años, a su marido y padre, respectivamente. René Angelil falleció en 2016 debido a un cáncer de garganta, por el que tuvo que ser alimentado por un tubo.
Además de René-Charles, la pareja tuvo otros dos hijos. En mayo de 2010, la pareja anunció que iban a concebir gemelos tras seis intentos de fertilización in vitro. El 23 de octubre, de ese mismo año, la cantante dio a luz a dos gemelos en Florida, a los que llamaron Eddy y Nelson. Sus nombres fueron un homenaje a Eddy Marnay, compositor argelino, y Nelson Mandela.
Tras la muerte de su marido, Céline siempre ha querido que sus hijos vivan en un entorno feliz. “Ha sido un viaje difícil”, comentó la cantante al ser preguntada por la prensa. Así, Céline decidió celebrar la vida todos los días y, sobre todo, en los momentos más especiales. Es por eso que a través de sus redes sociales ha compartido las grandes fiestas que organiza a sus pequeños, y los gemelos se han convertido en la gran herencia de su padre.