Trucos fáciles para comprobar sin salir de casa si una joya es de plata: ¡qué no te engañen!
Cuando pagas por una buena joya de plata esperas que, por lo menos, sea original.
Esto no nos salva de encontrarnos con joyas falsas o con baños de plata que no son lo que hemos pagado.
Para comprobar si nuestra pieza está hecho de plata podrás seguir una serie de trucos básicos sin salir de casa.
Cuando te compras una joya buscas calidad. Es por eso que habrá que tener mucho cuidado, ya que dependiendo de lo que paguemos, nos podremos encontrar con piezas auténticas y verdaderas o hechas de elementos de baja calidad. Por tanto, será muy importante saber lo que estamos pagando y, sobre todo, lo que estamos comprando. En el caso de que no te fíes de que la joya que has comprado es de plata, ¿cómo puedes averiguarlo?
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Lo primero que habrá que hacer será saber que la plata fina se compone de un 92,5% de plata y un 7,5% de cobre. Además, en el mercado existen una gran variedad de joyas o de productos que son plateados, y que aparentemente parecen de plata, cuando realmente no lo son. En la mayoría de ocasiones suelen ser acero o metal y presentan un baño ligero de plata.
1. Mirar su sello de garantía
Una de las formas para saber si un objeto es de plata habrá que mirar su sello de garantía. Debes saber que todos los productos de plata verdadera tienen que estar sellados para garantizar la calidad del material. En el caso de que no tenga esa marca es muy posible que o no sea de plata o que el país del que proceda no tenga una exigencia de tener esa marca.
2. Limpiar el producto con un paño
Otra opción será limpiar el producto con un paño. Cuando la plata es verdadera, esta dejará unas marcas negras en el trapo. Esto se debe a que la exposición al aire o a otros químicos que pueden estar en el trapo harán efecto en el objeto y surgirán esas marcas ennegrecidas. Eso sí, los objetos que son falsos no dejarán ningún tipo de marca.
3. Comprobarlo con un imán
También podrás hacer uso de un imán. La plata es paramagnética y sus efectos harán que no tenga casi fuerza. Por eso, cuando lo acerques al objeto, la plata apenas lo notará. En cambio, si está hecho de plata falsa sí que se adherirá fuertemente al imán, ya que estará elaborado con materiales metálicos.
4. Poner hielo encima del producto
De la misma forma, para realizar la comparación, podrás poner un poco de hielo encima de la plata. Si ves que se empieza a fundir será porque el objeto es realmente de plata y si el hielo no se inmuta es porque es falso.
5. Acudir a una joyería
En el caso de que aún te quede alguna duda, lo mejor será que acudas a una joyería, donde podrán hacerte una prueba química definitiva. Para ello, utilizarán ácido nítrico, con el que podrán saber si es o no plata. En el caso de que no lo sea, este tendrá un color verdoso debido al cobre que contiene.