Carlos Rivera, sobre su mujer y gran apoyo: “Sin ella no sé lo que habría pasado”

Carlos Rivera sabe lo que es trabajar duro, con esfuerzo y sudor, para alcanzar el éxito. Así lo demostró hace dos décadas cuando se alzó con el triunfo de ‘La Academia’ en México y también cuando triunfó en España dando vida a Simba en el musical ‘El Rey León’, representación que sigue arrasando y vendiendo todas sus localidades todavía hoy en día.

Esa experiencia sobre las tablas del Teatro Lope de Vega le sirvió para lanzar su carrera como solista al estrellato y ser considerado todo un referente del sector en su país natal. Así es como nos lo confiesa en una entrevista exclusiva que mantuvimos en las instalaciones de Sony Music España en pleno Paseo de la Castellana.

Feliz por haber vivido su primera experiencia con público presencial en el Carnaval de Tenerife y a unos horas de ver cómo todos sus seguidores podían escuchar sus nuevas composiciones, Carlos abría su corazón de par en par para Divinity y reflexionó sobre su evolución como artista, la salud mental y también el amor:

-‘Sincerándome’, ¿estamos ante tu disco más personal?

Aunque todos los álbumes tienen algo muy personal, este es especial. Con ‘Sincerándome’ quise hacer uno entero con ese tipo de canciones que a veces se van quedando la última o en medio de un disco y muchas de las veces son las que más conectan con la gente en los conciertos. Llegué a pensar que nadie las iba a entender y se convirtieron en éxitos, por lo que ahora he apostado todo un álbum con ese tipo de temas que dicen quién soy o hablan de cómo me siento, cómo amo, lo que no me gusta…

-¿Qué te llevó a componer tus canciones más sinceras? ¿El hartazgo del ritmo de vida que supone dedicarse a la industria musical o una vivencia personal en concreto?

Es mi séptimo disco, llevo más de 20 años dedicándome al mundo de la música y siento que he hecho de todo. Sin embargo, ahora quiero ir hacia adentro y explorar mis emociones. Quiero ir de dentro hacia afuera, como la portada del álbum. No son canciones típicas porque tratan ciertos temas de los que no siempre se compone. La mayoría de los artistas buscamos el hit que suene en todas las radios y plataformas y de repente se nos olvida que cuando se hace lo mismo que todos eres exactamente igual al resto, pero cuando uno se diferencia un poquito la gente presta atención.

Cada vez se hace menos música con el corazón y más ‘tortillas’, como decimos en México, es decir, una canción tras otra. Por eso yo tardo mucho en sacar discos, porque escribo con el corazón.

-¿Eres un hombre que expresa sus emociones sin importar lo que opine el resto o, en este caso, los fans?

Hay que expresar lo que uno siente y especialmente ahora que hay muchísimos problemas de salud mental. Con mis canciones me dicen muchas mujeres “mi esposo se siente así” y le cuesta trabajo decirlo y eso no es fácil para ningún cantante. En mi caso, que soy un artista masculino que compone para mujeres y la mayoría de sus fans también lo son es mu difícil conectar con los hombres y, de repente, me encuentro con que en mis conciertos son ellos los que más conectan. ¡Es muy fuerte! La fan era ella, pero ahora él también. Eso es muy bonito.

-Has confesado que ‘La carta’ es un temazo que le has dedicado a tu mujer que, según tus propias palabras “estuvo siempre ahí y no permitió que cayeras”. ¿Cómo fue ese momento y cómo te ayudó?

En mi última gira llegó un momento en el que reflexioné que empezó a llegarme todo lo que deseaba profesionalmente, pero no caí en esa letra pequeña que venía consigo también: la soledad del artista. La gente me ve sobre un escenario y cantando en un estadio, pero luego me voy solo al hotel y asimilar eso no es tan fácil. Llegó un momento en el que empecé a perder el sentido de la realidad y por eso es importante contar con buenas personas alrededor, que pueden ser amigos, familiares o del entorno laboral, y ellas deben decir “todo está bien, no pasa nada y disfrútalo”.

Cuando viví eso, ella me mandó un vídeo con todos nuestros momentos y al verlo caí en la cuenta de que era una bendición contar con una persona que te sacuda cuando estás un poco perdido. Sin ella no sé qué habría pasado. Hoy puedo compartir este tipo de canciones gracias a ella.

-Considero que has alcanzado el éxito a base de trabajo y esfuerzo. Tú mismo has reflexionado que “es fácil perderse cuando solo se recibe halagos y adulaciones”, ¿cómo recuerdas tus inicios? ¿Fueron duros?

Sí. Cuando gané ‘La Academia’, un reality muy parecido a ‘Operación Triunfo’, experimenté un ascenso muy rápido de la fama. Salía a la calle y me agarraban de la camiseta, pero pronto me pusieron en el banquillo y pasaron seis años en los que no me dejaron ‘jugar’. He ido aprendiendo a base de golpes de realidad y eso me hizo recomenzar. Mi gran oportunidad laboral fue ser Simba del casting original de ‘El Rey León’ en Madrid. Cuando eso sucedió y volví a México ya me veían con otros ojos porque entendían que ya había triunfado en la Gran Vía en España. Aún así, no conseguía conquistar los corazones de mis paisanos como yo quería hasta que la historia dio la vuelta y ahora sí que puedo decir que lo he conseguido.

-¿Has cerrado la puerta por completo a volver a participar en algún musical?

¡No! De hecho, en México volví y protagonicé la primera obra que vi en mi vida y con la que soñé hacer teatro. No descarto volver al teatro en España y, de hecho, me encantaría.