Simeone, Sabina y el 'Principito heredero': ¿por qué el Atleti es divinity?

divinity.es 19/05/2014 10:51

1. El estilo, fundamental

El camino lo abrió Quique Sánchez Flores. El del momento divinity del Atleti y el del 'savoir s’habiller' en la banda del Calderón. Pero lo de Simeone ha sido llegar y marcar estilo. El suyo. En el fútbol y en lo de la elegancia. Con ese corte siempre medio italiano que tiene todo lo argentino. Excelencia en fundido negro. Ese traje, esa corbata… ese rosario 'puntito macarra'. Un toque que recuerda a lo lejos a Guardiola y un alivio al 'no sin mi chándal'.

2. La Roja nos gusta y el Atleti ha vuelto

Si hay algo que nos gusta del fútbol es La Roja. Ese sitio donde poder ver a nuestros celebrities balompédicos favoritos, Casillas, Piqué, Xavi, Alonso, Fábgregas, Ramos… pero así, todos juntitos. A eso no aspiraban los hombres del Atleti desde hacía años. Ahora, La Roja ha tenido que rendirse a la ‘new wave’ rojiblanca y hacer hueco a los Koke, Mario Suárez, Diego Costa y Juanfran Torres.

3. Nuevo estadio, más moderno, ¡y con peineta!

No es que no lo fuera ya el Vicente Calderón, pero un estadio con peineta no tiene rival. Pura pasión ‘coplera’ al estilo Cholo Simeone la que le espera al cojunto rojiblanco cuando termine la mudanza. Un templo nuevo para el ‘imperio argentino’ que está levantando el míster.

4. Ante la crisis, un flotador para los humildes

Ser del Atleti si la crisis económica te ha sacudido no es un consuelo de nada, pero tampoco hace daño ni empeora el panorama. Si el rojiblanco es el equipo de los humildes, qué mejor flotador para la crisis que llegar a casa y aliviar las penas a golpe de goles y finales europeas. No llegaremos a decir que este Atlético del Cholo está haciendo una labor social, pero en divinity somos muy fans de esas sonrisas y abrazos de la grada rojiblanca cuando peor parece estar todo lo demás en el país.

5. Porque poner de acuerdo a un Príncipe y a un cantautor republicano tiene que ser divinity

“Y el principito heredero, corazoncito de colchonero”, cantaba Joaquín Sabina en su himno del Atlético de Madrid para celebrar el centenario en 2003. Un equipo de fútbol que es capaz de provocar que heredero y cantante intercambien parejas aunque sea para un vals, no nos podía pasar desapercibido. Si el Ateti gana la Champions queremos abrazo monárquico-sabinero.

6. Los futbolistas que no olían a anuncio de perfume

Un poco de testosterona de la de siempre, sin boxers ajustados con fondo en blanco y negro ni perfumes caros en pechos depilados. Eso es lo que los hombres del Cholo respiran en cada jugada, en cada gol o en cada rueda de prensa. En un mundo, el futbolístico, que empezaba a saturarse un poco de los Beckham y Ronaldos engominados, el gentleman de arrabal porteño es como un soplo de aire fresco.

7. El homenaje a Luis Aragonés, el Marlon Brando castizo de los 70

Antes de ser el Sabio de Hortaleza, ese señor cascarrabias y canoso que nos hizo ser leyenda, Luis Aragonés lucía en los 70 el porte castizo del gentleman de Madrid. Patillas, camiseta ajustada y una melena y una pose dignas de Marlon Brando. Luis Aragonés nos ha dejado este año y la ternura con la que su equipo está rindiéndole homenaje se merece nuestro reoconocimiento a un hombre que de haber estado nosotros en los 70 habría llenado portadas.

8. Los famosos del Atleti molan más

Sabina, Alaska, Ketama, Javier Bardem, Rosendo… el Atlético de Madrid rezuma ese estilo como de domingo de mayo en La Latina que a los famosos más ‘cool’ les queda que ni pintado. Además, sólo la posibilidad de que Belén Esteban, David Trueba y el Príncipe puedan estar de acuerdo en algo merece un elogio.

9. Si José Tomás es del Atleti, será por algo

Si el toreo es divinity o no, sería una cuestión filosófica de las de entrar en bucle y no salir jamás. Pero José Tomás, ese icono entre vintage, chulapo y místico intelectual que nos apasiona, es una vaca sagrada en el olimpo divinity. Un matador de toros que colecciona ositos de peluche. Un ser complejo de mirada fascinante que, sin embargo, eligió ser del pueblo llano a la hora de abrazarse a un equipo de fútbol. No hay nada más divinity que ser asceta, vestir de rosa palo y oro y haber nacido en Galapagar. ¡Ah, y juntarlo todo al calor de unas rallas rojiblancas!

10. La familia y once más…

Hay dos maneras de ir al fútbol sólo y con un puro en el bolsillo de la camisa, o en familia con el bocadillo. "En el Metropolitano lloraba mi abuelo con mi papá de la mano", dice, de nuevo, Joaquín Sabina. Ese sufrimiento de antihéroe que tiene el Atleti, ese sacar al hombre rojiblanco de su primitiva masculinidad para ponerle una lagrimita que siempre asoma pero no termina nunca de caer. Nos encanta esa ternura del padre de familia atlético que en el Calderón no se enorgullece de su equipo ante la familia. Lo que luce con orgullo es la familia ante su equipo.

11. Papá, ¿por qué no somos del Atleti?

La publicidad es un arte y las campañas del Atleti su Andy Warhol. Cuando todos los equipos apelan a la grandeza, la gloria, la excelencia eterna… el Atleti saca a un niño por la tele haciendo la pregunta del millón y de un plumazo enamora a media audiencia. Los últimos años de marketing rojiblanco son una lección de estilo y gusto por el buen hacer.