La llegada de la hija del señor Azin cambiará las cosas. Aysha causa un gran impacto en Can. Aventurera, libre, trabajadora y amante del riesgo y los viajes tiene muchas cosas en común con el fotógrafo, que queda tan impresionado que no duda en invitarla a comer. Los celos de Sanem no se hacen esperar y monta un numerito de los suyos. Aún así, no se va a dar por vencida. "Si hace falta iniciaré la tercera guerra mundial. Hace tiempo fui capaz de conquistar su corazón y lo volveré a hacer". Y por supuesto, el ataque de celos de Sanem no pasa desapercibido para Can.
Después de varios meses con sus hijos y tras revivir el amor de su juventud, el señor Aziz toma una inesperada decisión. "Me reencontré con el amor de mi vida y se parece cada vez más a Hüma. Así que puede que el problema lo tenga yo y sea yo el que las cambia. Esto no marcha", dice el padre de Can y Emre, que antes de marcharse les da instrucciones claras a sus hijos. "Emre, cuida bien de Leyla y no le hagas daño. Y tú Can, no olvides lo que te dije sobre Sanem. Nunca sueltes su mano. Nunca."
Siguiendo los consejos de su padre y aunque no recuerda nada, Can decide acercarse cada vez más a Sanem. "Esto también es por esa cara tan bonita y tu bello corazón. No renunciaste a mí a pesar de haber perdido la memoria. Te veo capaz de desencadenar una tormenta con esos ojos tan vivos que tienes".
Sin embargo, las bonitas palabras de Can no son suficiente para Sanem lo que provoca fuertes encontronazos con Can. "El amor que has borrado de tu corazón está grabado a fuego en el mío. No se puede borrar, no desaparecerá y me voy a volver loca. Estuve ingresada en un psiquiátrico y me atiborraron de pastillas y ni siquiera así lo pudieron borrar. ¿Cómo has podido olvidarlo".
Viendo la desesperación de Sanem, Can decide tomar medidas. No solo Sanem necesita que recupere la memoria. Vivir así se ha convertido en un auténtico infierno. Sin embargo, las noticias que le da el médico no consiguen calmar la situación. ¿Es posible que haya olvidado su relación con Sanem para olvidar también todo el daño que le hizo? "Puede que sea yo quien no quiere recuperar la memoria", le confiesa a su hermano.
Mientras, Sanem desespera. "Can no siente nada por mi y creo que va a usar su amnesia para irse de aquí". Pero no puede estar más equivocada. Leer el libro convence a Can de que tiene que hacer todo lo posible por recordar y tiene un plan. Organiza una encerrona en un hotel en el que poder pasar tiempo con ella. Sin embargo, no se lo pondrá nada fácil. Convencida de que Can necesita tiempo intenta darle su espacio.