Lucía Fernanda, la hija de Antonio Carmona y Mariola Orellana, se desvincula del apellido de su padre: "Me pesaba"

  • Antonio Carmona y Mariola Orellana tienen dos hijas: Marina y Lucía Fernanda

  • Ambas han seguido los pasos de su padre y buscan su hueco en la industria de la música

  • La pequeña de la familia ha explicado el motivo por el que se ha desvinculado del apellido paterno

Nieta de Juan Habichuela e hija de Antonio Carmona, era de esperar que Lucía Fernanda y su hermana Marina siguieran sus pasos -cada una con estilo propio)-. En esta ocasión nos centramos en primera. La menor del clan Carmona Orellana también ha sentido la llamada del cante aunque lo ejecuta “a su manera”, combinando el flamenco con ritmos urbanos. Reinvindica llamarse con su nombre compuesto -algo que “de pequeña odiaba” y le cabreaba muchísimo- pero ha evitado que se le vincule con su apellido paterno porque no quería sentirse etiquetada.

"Empecé haciendo un tipo de música que yo consideraba que era distinta a lo que venían haciendo todos los Carmona y toda la saga Habichuela. Es verdad que siempre con la influencia y las raíces de dónde vengo, pero he hecho algo diferente. Llevado a lo que se escucha ahora y a lo que yo misma escucho. Me pesaba un poco el apellido Carmona para lo que estaba haciendo y decidí desvincularme. No por ser la hija de Antonio Carmona, sino por mi música”, aclara la joven de 26 años en una entrevista para ‘El Español’.

Tanto ella como su hermana trabajan en la actualidad en el tour de C.Tangana. Lucía Fernanda, además, acaba de sacar al mercado su nuevo single, Alili, junto a Sami Duque. “Desde pequeña sabía que quería ser artista. Yo veía lo que había en mi casa y decía 'quiero ser como ellos'. No sabes la de artistas que han pasado por mi casa... […] Hubo una época en la que empecé a crecer y me dio más miedo y respeto este mundo, pero después me empezó a venir solo. […] Gracias a Dios me puedo dedicar a ello, que es mi sueño y súper contenta”, afirma.

El principal consejo que le ha dado Antonio Carmona a su hija

Antonio, su padre, le ha animado a cumplir su sueño, pero siempre le ha advertido que dedicarse a esta profesión es “bastante duro”: “Desde fuera parece que es muy bonito, y lo es de verdad, el dedicarte a lo que te gusta, pero conlleva muchas cosas. Es exponerte mucho, exponer tus emociones. Cantar es exponerte al máximo y entregarte a la gente. Mi padre me ha aconsejado, como te digo, que lo haga trabajando y desde mi sitio. Sabiendo lo que quiero. Siempre me ha dado buenos consejos. Me ha dado siempre su opinión, las canciones se las pongo a ellos primero”.